La arquitectura del movimiento moderno es un concepto o estilo arquitectónico que nace en la década de los años 20’s como respuesta a la rápida industrialización que venía sucediendo en Europa y Estados Unidos en época de post-guerra. La arquitectura moderna se origina a partir de los grandes cambios sociales y culturales vinculados a esta misma industrialización. El estilo hace énfasis en la aplicación de nuevos materiales que sean de fácil producción en masa aunado a la tecnología que esto conllevaba fabricar. El modernismo rechaza ideas “antiguas” tradicionales e históricas, haciendo énfasis en la función del edificio, la simplicidad y racionalidad de la arquitectura, dejando a un lado, tajantemente, la ornamentación.
La caracterización de su arquitectura se plasma en las líneas limpias y continuas de su perfil arquitectónico, de formas geométricas bien definidas, puras y sencillas en la mayoría de los casos. Sus interiores resultan ser abiertos, expuestos a la vida de la ciudad, flexibles en su composición.
La arquitectura moderna no solo se basó en una idea rectora. Sus orígenes dieron luz en países como Alemania, con la apertura de la escuela de la Bauhaus de Walter Gropius y Mies Van Der Rohe, una escuela de arquitectura, arte y diseño fundada en el año de 1919 y cerrada posteriormente por el partido nazi. Otros importantes exponentes del modernismo fueron el arquitecto francés Charles Edouard Jeanneret-Gris mejor conocido como Le Corbusier; Frank Lloyd Wright en Estados Unidos; y el constructivismo ruso, todos ellos fundadores del movimiento moderno.
Las contribuciones e ideas de todos los arquitectos referentes del modernismo fueron impuestas en el Congreso Internacional de Arquitectura Moderna, CIAM. El CIAM funcionó como instrumento de convergencia para imponer un estilo único e internacional con la intención de homogeneizar la arquitectura. Este estilo internacional fue escuchado por primera vez en el año de 1932 por los críticos Henry Russell Hitchcock y Philip Johnson, este último siendo el primer premio Pritzker de la historia.
Finalmente, los mismos principios de la arquitectura moderna fueron los que dieron caída al movimiento, principios como el rechazo a la arquitectura histórica o de movimientos anteriores, como la del Siglo XIX, la falta de identidad de los proyectos, la macro escala urbana y el emplazamiento y ubicación de los complejos fueron los principales verdugos del modernismo.
La historia de la arquitectura moderna es tan compleja y larga que uno no podría resumir en tan poco espacio la importancia que este movimiento hizo por la historia de la arquitectura.