¡Y seguimos "haciendo feo" desde el más leído, banda lectora! Estamos por Acámbaro tocando el pandero desde esta "casota" editorial, como es costumbre, martes, jueves y sábados y el día de hoy me pongo payaso con información que a todos nos puede ayudar, particularmente a aquellos que andan en la búsqueda de la aceptación de forma equivoca e irreal. Por ahí encontramos "banda" que busca ser "aceptada" a través de la utilización de determinados elementos que a consideración de su deteriorada forma de pensar los lleva a "pertenecer" (al menos eso creen). Como decía mi cabecita de algodón, ¡allá ellos!

Para quienes gozan de una escasa o precaria ¡de plano! valorización de su propia persona, el principal objetivo es buscar la "distinción" a partir de la posesión de un flamante vehículo y un vestuario que goce de virtual prestigio, ¡garras de marca pues! Encuentro, queridos valedores, que nuestra forma de vestir, nuestros gestos, nuestras palabras o frases (algunas de ellas, por cierto, son utilizadas con común frecuencia porque "aluden" a la banda fifí. ¡"imita changos", banda lectora! ¡carentes de autenticidad como siempre!

Hablan mucho más de nuestra personalidad que la mejor ropa de marca o "colguijo" ¡por cierto! entre algunas de las "frasecitas" están:  la de "aún", la típica, "ya sabes",  la de "exacto", la de "así",  pero que me dice del "manoteo", otra más que indica prepotencia, y por supuesto que tenemos que entender carnalitos, o al menos así lo considera este mafufo escritor, que quien "sigue" la moda al pie de la letra , con todo respeto, está fuera de sincronía.

Dicho sea de paso, el que así lo crea se está defecando fuera de la bacinica ¡de plano! ¡en cortina!  ¿por qué buscar luces falsas para brillar?

Sin duda, si no traemos ese "falso" jamás brillaremos , tenemos que ser coherentes con nuestra forma de vestir, la imagen que demos a los demás tiene que ser nítida, neta. De no ser así la frivolidad y la falsedad estarán al descubierto ¡buzos caperuzos!

Es obvio que no es lo mismo salir con una amiga de forma casual, donde no importa tanto la vestimenta, que asistir a determinado evento que solicita "etiqueta rigurosa".

Evidentemente, brothers, nuestra forma de vestir refleja quiénes somos verdaderamente. Acuérdese miolector que al final del día "somos lo que somos".

Se la voy a correr mi lector ¡"deunavena pa´l atole"! Según este mafufo que escribe, son varios los ingredientes que "ungen" un buen "concentrado" de personalidad. De entrada busquemos esa anhelada coherencia entre lo que somos y nuestro proyecto de vida. Para empezar, nuestro estilo deberá revelar nuestra forma de ser. Rechacemos lo estridente, lo vulgar, el típico disfraz, pero sobre todo rechacemos el sometimiento constante de los cañones de la moda

El chiste es tratar de encontrar la misma naturalidad que existe en la propia naturaleza, fingir cansa, ¡aburre, "parnitas"! ¡Almejas", no se les vaya a caer el cantón!

Dicen por ahí que aún cuando seamos feos busquemos por lo menos ser pintorescos. Necesitamos más creatividad, brothers, en los diferentes proyectos de nuestra vida y el "disfraz", hay que decirlo, forma parte integral de nuestro desarrollo

Procuremos no caer en la ya muy "aplaudida" rutina porque lo más seguro es que nos den Patricio y con un inminente peligro de ser "desalojados" ¡ahora sí, "desalojados", pa´bajo por "pichicatos" en el estilo. "Usted no diga frío hasta no ver a los pinguinos." "Usted no diga ¡mamá mi leche!" ¡atórele! ¡arre! ¡atrévase mi ching-wong ! no le saque al parche, su majestad. Vístase con libertad y apego a su estilo. Dicen que no nada más hay que ser torero ¡sino parecerlo! necesitamos personalidad, esa mística suma de un cúmulo de características físicas, mentales, y morales que todos tenemos pero que no explotamos, ¿por qué? Porque buscamos elementos que acaban por opacar esa "luz propia". Hay que recordar que las estrellas brillan con luz propia y que los planetas y la la luna no brillan con luz propia.

Ahí se las dejo de tarea, se despide, banda lectora, su reporñerazo favorito.