Considera que son gajes del oficio.

Sergio Marín contó que en su jornada laboral como chofer de plataforma ha registrado al menos tres incidentes que considera son gajes del oficio, pero que le han costado dinero.

Estos sucesos -dijo- ocurrieron con unos clientes que le pidieron el servicio de transporte por medio de la aplicación de Didi.  Señaló que hace cinco meses dos jóvenes en estado de ebriedad pidieron un viaje de la Plazuela del Zacate al municipio de Zacatepec.

Cuando subieron al vehículo, uno de ellos prendió un cigarro, el conductor le pidió apagarlo porque las reglas de la plataforma señalan que está prohibido fumar dentro del automóvil.

El usuario atendió la petición, pero a manera de venganza lo apagó en el respaldo del asiento del conductor.

“Al otro día me di cuenta de que el joven quemó un pedazo del asiento, se quiso desquitar por lo que le dije y ahí apagó su cigarro. Reporté este caso a la plataforma pero me dijeron que no podían hacer nada”.

Relató que en otra ocasión dos jóvenes, también ebrios, pidieron el servicio de plataforma pero  antes de llegar a su destino vomitaron en los asientos del vehículo..

De este caso el conductor sí podía reportarlo a la empresa de Didi pero dijo que no lo hizo porque se pierde mucho tiempo en buscar un autolavado que le entregue una factura por el servicio de lavado y luego, la plataforma decide si hace la devolución de gastos.

“La empresa nos aconseja que reportemos cada anomalía, pero no siempre nos dan solución y a veces se tardan mucho en lo que hacen la investigación. Por eso creo que son gajes del oficio y ni modo, hay que seguir”.

De su labor refirió que al día realiza entre 20 y 22 viajes, un número que se incrementa el fin de semana, porque los jóvenes salen a divertirse y piden los servicios a las plataformas en lugar de utilizar el taxi.