¿Alguna vez pensaste en escribir pero no te animaste? ¿Tienes una obra terminada pero no das el paso para publicarla? ¿Conoces a alguna persona que se encuentre en esta situación, con una obra bajo el brazo aunque todavía inédita?

Mucha gente escribe, aunque no se consideren escritores profesionales. Lo hacen con una clara intención personal de transmitir algo. Es decir, tienen una cosa dentro de ellos que desean plasmar en un texto y casi siempre compartir con alguien más. Podemos decir que son escritores fortuitos o de una obra íntima.

Asimismo, hay quienes sí se ven como escritores literarios, artistas, pues, pero tampoco han editado su obra por ningún medio. Muchos de ellos podrán tener diferentes razones para su actual situación, pero varios (no sé cuántos) permanecen inéditos debido a una baja autoestima literaria. Extraño pero cierto.

En mi camino como escritor, pero también como editor he visto muchos casos. A veces he leído obras que podrían venderse en diversos públicos u otras tan personales que quizás solo alcanzarían un tiraje breve, pero en ambos casos son obras que muy probablemente nunca llegarán a manos de los lectores.

La autoestima: en otra columna he dicho que en la Ciudad de México abundan los escritores con autoestima alta y que en muchas ciudades del interior los hay, pero con la autoestima baja. Esto tiene que ver con el centralismo nacional, pero también con otros aspectos, como la idea de que en México se valora poco a los artistas, o que es difícil vender un libro o que quizás al lector no le guste la obra en sí.

Es imposible saber si un libro gustará antes de que se publique. Cierto que hay dictaminadores y editores (francos y honestos), pero recordemos que en nuestro país la última palabra la tiene el lector, en especial por la falta de críticos literarios en servicio. Hay libros que, apenas se publican, provocan algo en donde aparecen; mientras que existen otros que por más que se promueven no generan reacción alguna.

Todo escritor (profesional, en formación, amateur o fortuito) tiene derecho a ser publicado. Cierto que no todos lo conseguirán (muchas veces por sus límites mentales), pero quien logre el tremendo salto de escribir a publicar sabrá (y solo entonces) lo que su obra podrá aportarle a la humanidad, aunque sea solo en la familia, los amigos, los compañeros o algunos cientos de lectores de su localidad.

La baja autoestima literaria es un mal endémico. No me refiero a la prudencia que, bien entendida, hará a cualquier persona dominarse y dar lo mejor de sí misma, sino de plano a un sentido de reducción de la personalidad o de poca valía de las letras propias, por el solo hecho de tener una edad avanzada, no contar con títulos universitarios, ser desconocido a la fecha, haber recibido comentarios desagradables o vaya usted a saber por qué.

Es decir, me refiero a autores que ya trabajaron con ahínco en su libro (novela, libro de cuentos o ensayos o poemas, incluso de desarrollo humano o autobiografía) y que quizás ya hasta lo mandaron corregir, pero que no se animan a publicarlo, por ciertos temores, a veces al ridículo… o quizás al éxito.

“El mundo es de los valientes”, podría decir algo sobrado, pero me conformaré con afirmar que “la vida es un riesgo” y que “en el arte más que certezas hay oportunidades”.

Yo mismo tuve temores como escritor, tanto de qué iba a vivir, sobre mi estilo de vida y hasta de si llegaría a publicar, pero de alguna forma encontré la seguridad en el trabajo (la disciplina, el esfuerzo, la pasión, el estudio). En mi vida personal poquísimo me importan las opiniones de las personas en general, pero a la vez respeto profundamente la opinión de mis lectores.

Por eso, te invito al Taller de Autoestima para Escritores (a distancia), 25, 26 y 27 de noviembre, de 9 a 12 de la mañana (centro de México). Compartiré con los participantes mi experiencia, anécdotas, estrategias, herramientas y opciones para publicar y vender sus obras y por fin saber lo que el público opina de ellas. Informes al correo: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.