Profesores afiliados a la Coatemor exigen información sobre el dinero de ese programa federal destinado este año a alimentación y pago de maestros; piden conocer la forma de operación y cuestionan los métodos actuales.
La Coalición de Trabajadores de la Educación del Estado de Morelos (Coatemor) advirtió que los maestros de la entidad no apoyarán la conformación de los Consejos Escolares de Administración Participativa de Padres de Familia (CEAPP) si no cuentan con información sobre la manera en la que opera el programa La Escuela es Nuestra (LEEN).
La organización exigió que se dé respuesta clara a los docentes del extinto programa Escuelas de Tiempo Completo (ETC), pues tenían la expectativa de volver a participar en los horarios ampliados con el nuevo esquema.
Luego de que el delegado de la Secretaría del Bienestar diera a conocer los lineamientos generales de LEEN, hubo reacción inmediata.
Al respecto Yossmin Castillo Castrejón, presidente de la Coatemor, recordó que la SEP desde el 28 de marzo pasado ya esbozó las partes del nuevo programa, pero aseveró que sigue sin aclararse algo que afecta la vida laboral de los trabajadores de la educación, que es el pago de salarios a los docentes que darán las clases durante los horarios ampliados.
Comentó que las reglas de operación federal indican que en cada escuela que sea incorporada al Programa LEEN se debe conformar un Consejo de Administración Participativa de Padres de Familia, que manejará los recursos económicos.
En este punto, resaltó que han expresado su inconformidad porque se pretende que sean esos CEAPP los que paguen a los docentes, “pero los trabajadores de la educación no pueden tener un patrón sustituto del patrón federal”. Por eso se ha pedido que esa remuneración sea realizada por el gobierno federal a través del Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa (FONE) por medio del cual se paga actualmente a los maestros del país.
Además, insistirán a través del movimiento nacional que surgió para defender las ETC que se sostenga la propuesta de que a los maestros se les pague como si fuera una jornada completa con las horas que trabajan, para que se consideren los pagos a la hora de calcular prestaciones y demás aspectos administrativos y laborales.
De acuerdo con información recabada por La Unión de Morelos, hay inquietud entre padres de familia, docentes y directivos que estaban en escuelas inscritas a ETC, porque se generaron la expectativa de que en el arranque del ciclo escolar 2022- 2023 se incorporarían más planteles, pues en Morelos había más de 590 escuelas y a nivel nacional más de 27 mil.
Docentes y jefes de sector señalaron que en las escuelas que están en el multicitado programa LEEN, desconocen qué se ha hecho con el recurso que se supone que deberían haber entregado en Morelos. También dijeron que no se han conformado los comités y ya se presupuestó y etiquetó el dinero para este ejercicio fiscal 2022, por lo que les queda la menos de la mitad del año para ejercerlo.
También dijeron que estas altura los “siervos de la nación” (trabajadores de la secretaría del Bienestar) no se ha puesto en contacto con las autoridades educativas locales ni con supervisores o directores que ya estarían -en esta semana y la que entra- integrando los CEAPP.
“Es una contradicción que manden el programa de la SEP a la Secretaría de Bienestar porque no saben ni lo que están haciendo. Los siervos de la nación, que son los responsables de instalar los CEAPP, llevan otra mentalidad diferente, porque no se trata de dividir o confrontar a los padres con los maestros, pero eso es lo que está haciendo, porque ellos quieren que el mayor recurso que llega se destine a infraestructura dejando por un lado la alimentación de los niños y el pago de salario de los maestros y eso es un error, lo que van a conseguir son problemas y que no se logre conformar los citados comités”, advirtió.
“Vemos con tristeza que no sólo no se metió a las (escuelas) que estaban pendientes, sino que se redujo las que había en LEEN el año pasado”.
“Lo que para nosotros queda claro es que si los jefes de sector, supervisores, maestros y directores no reciben la instrucción y la información por parte de su autoridad superior, que es el IEBEM, no van a participar y no van a poner en marcha la conformación de los consejos. Entonces habrá un problema, porque aunque les dan hasta el 31 de diciembre para ejercer los recursos, pues no se concretará”, anticipó.
Recordó que la norma dice que dichos consejos deben estar conformados por padres de familia, cuando menos un maestro, un directivo, alumnos y gente de la comunidad.
Refirió que como pago a los maestros se maneja un monto mínimo de 60 pesos por hora, pero si se decide en esos comités destinar el dinero a alimentación o al pago de docentes para ampliar el horario podrían aumentar la cantidad.
Castillo Castrejón insistió en que no tienen información de cómo ha funcionado el programa en Morelos, pero les preocupa que en otras entidades, los trabajadores de la educación han documentado que “’los siervos de la nación’ llegan a las escuelas, dicen qué tienen que hacer, contratan a las empresas que ellos quieren y se está generando el desvío de recursos. Lo peor es que después a la hora de fiscalizar el dinero, la responsabilidad recaería en los papás y mamás”.
El representante de la Coatemor dijo que ya solicitaron información a la SEP, a la Secretaría de Bienestar federal y al Congreso de la Unión, pues han circulado unas listas en redes sociales que no son oficiales sobre supuestas escuelas beneficiarias.
Aseveró que si encuentran anomalías en Morelos las van a denunciar, porque hasta donde tienen conocimiento “aquí no se ha ocupado el recurso en los componentes de alimentos y pago de maestros por horarios ampliados y nadie sabe dónde y cómo se aplicó ese recurso público en lo relativo a mantenimiento o infraestructura. Al ser parte del erario debe haber transparencia”.