Actualmente y con base en la Ley de Salud Mental del Estado de Morelos, toda persona que habite o transite por el territorio tiene derecho a recibir atención en dicho ámbito de manera gratuita.

La salud mental se compone de distintos rubros, como bienestar emocional, psicológico y social de cada persona. Partiendo de ahí, los servicios de salud emocional deberían concentrarse aún más en la mirada de la prevención, apoyar los espacios de prevención ya existentes, como los Centros Integrales de Salud Mental (Cisame) y dar lugar a instalaciones nuevas, propuestas y creadas desde las juventudes morelenses, de acuerdo a las propias necesidades de cada ciudad o poblado.

Se debe ampliar la visión que se tiene de salud mental con alternativas de prevención distintas a las convencionales, como el enfoque de la psicología social-comunitaria, cuyas actividades no necesariamente suceden dentro de un centro, institución u hospital, sino se trabaja desde la misma comunidad.

Es necesario acercar las propuestas a los 36 municipios de Morelos para que esta visión de “salud para todos” sea una realidad.

Actuar desde la prevención pudiera convertirse en la mejor tirada de la salud mental en el Estado.