Lo anterior se deriva del Seminario Institucional “Situación actual del sarampión en México y perspectivas de eliminación” que se realizó con el fin de proporcionar a los tomadores de decisiones, a los medios de comunicación y, por conducto de éstos, a la población en general “información veraz, precisa y de primera mano sobre dicha enfermedad, dada la relevancia que este tema ha cobrado en las últimas semanas en nuestro país”.
En este marco, la doctora Vesta Richardson López Collado, directora general del Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia (Censia) de la Secretaría de Salud, explicó que el Programa de Vacunación Universal consta de dos elementos principales: un programa permanente que consiste en la aplicación de la vacuna triple viral al año de vida, con un refuerzo a los seis años, y acciones intensivas que incluyen las tres Semanas Nacionales de Salud que se llevan a cabo anualmente, así como otras campañas especiales.
Señaló que en 2008 se vacunó a 22 millones de jóvenes entre 19 y 29 años de edad, con la vacuna doble viral contra sarampión y rubéola, lo que representó un logro del 107.3% al cierre de la campaña (considerando las proyecciones de población del Conapo); y entre diciembre de 2010 y junio de 2011, se aplicaron dosis adicionales a las aplicadas en el programa permanente de la vacuna doble viral a 7.4 millones de niños (entre 1 y 4 años).
No obstante ello, alertó, la cobertura del Programa de Vacunación está aún muy lejos del 95% deseable, pues de acuerdo con las cifras del Consejo Nacional de Población (Conapo), se ubica en 71.2% y 75.3% en niños de un año y de seis y siete años, respectivamente. De ahí la necesidad de trabajar para conseguir coberturas superiores al 95% en todos los municipios, usando como referente la población registrada por el Conapo. Las cifras de cobertura de vacunación previamente referidas, explicó, podrían ser superiores, considerando que en el numerador sólo se consideraron las dosis aplicadas a los niños reclutados al sistema de información oficial (PROVAC), y seguramente se han vacunado muchos niños que no están incluidos todavía en el censo nominal que da sustento al PROVAC.
La directora general del Censia ubicó en cuando menos 2.5 millones de habitantes la población susceptible no vacunada por no entrar en alguno de los grupos etarios (que tienen la misma edad) protegidos por el esquema vacunal.
El Centro de Información y Divulgación del INSP dio a conocer que en dicho seminario la doctora Vesta Richardson expuso que “en cuanto a los potenciales riesgos de introducción de la enfermedad en nuestro país, mencionó además de las epidemias actuales en Europa y Asia y de esa amplia población susceptible no vacunada, el alto número de viajes por motivos vacacionales en el periodo de verano, los próximos Juegos Panamericanos en Jalisco y, de manera señalada, la insuficiencia en la producción de dosis por parte de los proveedores para una posible contingencia.
“Finalmente, respecto a las acciones tomadas, destacó la alerta epidemiológica transmitida a las autoridades de salud estatales; la intensificación de las actividades de vacunación en niños de 1, 6 y 12 años; la adquisición de 100% de dosis adicionales de vacunas doble y triple viral para bloqueos vacunales y reserva, y la vacunación a población susceptible con segunda dosis de doble viral, entre otras”.
Por su parte, informó el instituto, la doctora Celia Alpuche, directora general adjunta del Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (Indre), afirmó que “México está preparado para la vigilancia virológica de la enfermedad, como quedó demostrado con la detección del reciente caso de la niña que llegó desde Francia.
“En ello, enfatizó, ha jugado un papel importante el Indre, sobre todo en lo que se refiere a la confirmación. Al respecto, señaló que los primeros cinco días son importantes para la genotipificación o identificación del tipo de virus, ya sea autóctono o importado, por medio de su aislamiento viral. Sin embargo, menos de la mitad de las muestras llegan en tiempo para llevar a cabo dicho análisis molecular.
“En cuanto a la serología, mencionó que las mejores muestras se obtienen dentro de los primeros 35 días. Asimismo, dijo que México trabaja fuertemente para la identificación de genotipos del virus del sarampión desde el 2002, especialmente desde el 2004, por lo que tanto la red de laboratorios como el Indre están preparados para cumplir con sus tareas de vigilancia virológica-epidemiológica, la cual permite, junto con la epidemiología molecular, verificar la eliminación del virus en la región de las Américas, y mejorar la presentación oportuna de la información del genotipo, aunque para ello es preciso incorporar nuevas técnicas, realizar estudios de seroprevalencia que apoye los programas de vacunación y fortalecer esfuerzos para obtener muestras virológicas más tempranamente, incluidas muestras de sangre en papel filtro (manchas de sangre seca) y las de saliva, recientemente validadas por los centros de colaboración de la Organización Mundial de la Salud”.
En el mismo marco, José Valente Aguilar Zínser, director general de Protección y Medicina Preventiva en el Transporte de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), (continúa el comunicado del INSP) “mencionó el constante riesgo de importación de enfermedades que implica el sistema de transporte internacional, en virtud de la rápida comunicación entre países de todos los puntos del orbe. Así, por ejemplo, señaló que en el mundo existen 1280 aeropuertos internacionales, y que desde 2006 se han realizado 68.6 millones de despegues y aterrizajes, ha habido 4.5 millones de pasajeros internacionales, y de cada 100 mil viajeros, 50 mil desarrollan un problema de salud relacionado con su viaje, 8 mil consultan un médico, 5 mil requieren reposo en cama, mil 500 se incapacitan, 300 requieren hospitalización y uno fallece por alguna enfermedad relacionada con su viaje.
“En lo que se refiere al ámbito nacional, el funcionario de la SCT señaló que existen 54 aeropuertos internacionales en 31 estados, y que en 2010 hubo más de 25 millones de pasajeros, 49 destinos internacionales atendidos por empresas nacionales, 93 ciudades internacionales con conexión en el país atendidas por empresas extranjeras y 62 empresas extranjeras con operaciones hacia o desde el país.
“En siete de esos aeropuertos (Ciudad de México, Cancún, Guadalajara, Monterrey, Puerto Vallarta, Tijuana y Toluca), que representan más del 90% de las operaciones internacionales del país y del movimiento de pasajeros, informó que en colaboración con la Secretaría de Salud, la SCT ha iniciado el Programa de Implementación de Capacidades Básicas, que tiene como propósito evaluar dichos puertos aéreos con el apoyo de distintas instituciones, entre ellas la Dirección General de Aviación Civil, Sanidad Internacional, SEDENA, CISEN, Policía Federal, Migración, Aduanas”.
Por su parte, el doctor Ignacio Santos Preciado, investigador de la Unidad de Medicina Experimental en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), señaló que “las Américas están libres de transmisión autóctona de sarampión desde el 2002, pues si bien se han registrado 685 casos en el 2011, uno de ellos en México, todos fueron importados, asociados a importación o desconocidos. En cuanto a la tasa de transmisión en la región, indicó que ésta se ubica en 0.7; y respecto al grupo etario más vulnerable al virus, mencionó a los niños y a todos aquellos que no recibieron segunda dosis de vacunación. En Estados Unidos y Canadá, por ejemplo, los casos secundarios se han dado en niños que no han sido vacunados por cuestiones religiosas”.
El doctor Santos dijo también que el sarampión es una de las principales causas de muerte en el mundo. Sólo en 2008 cobró la vida de 164 mil personas, 450 por día y 18 por hora. No obstante, se ha dado una reducción global de muertes del 78% en virtud de la vacunación, lo que equivale a 12.7 millones de muertes evitadas desde el año 2000. En cuanto a la cobertura vacunal global, ésta se ha incrementado de 72% a 83%. En lo que atañe a México, en 1996 se presentaron los últimos dos casos autóctonos y, en 1995, la última muerte por sarampión. Empero, en el 2000 se reintrodujo el virus con la presencia de treinta casos en cuatro entidades federativas.
En cuanto a las estrategias de eliminación propuestas por la Organización Panamericana de la Salud, el doctor Santos mencionó la campaña de vacunación masiva para poner al día la vacunación rutinaria, para dar el mantenimiento de coberturas elevadas y las campañas de seguimiento en menores de 5 años para disminuir la acumulación de susceptibles y para alcanzar coberturas del 95% en cada municipio. Al respecto, señaló que tales estrategias deben ser complementadas por un sistema sensible de vigilancia capaz de detectar oportunamente la circulación del sarampión, por una investigación de todos los casos hasta su clasificación final, por un sistema eficaz de vigilancia virológica y sobre todo por una supervisión de las acciones.
Finalmente, señaló la factibilidad biológica de la erradicación global del sarampión para el 2020, lo cual, sin embargo, requiere de una alta inmunidad poblacional, es decir, de una permanente vacunación, pues el virus no tiene reservorios ni ha mutado o evolucionado.