Alfredo, quien trabaja como operador del transporte público, señaló que está consciente de que debe respetar los descuentos a las personas de la tercera edad porque es un derecho; sin embargo, dijo que esa situación afecta sus ingresos económicos, pues en ocasiones con mucho esfuerzo reúne el dinero para el combustible.
A decir del trabajador del volante, en ocasiones no logra completar ni siquiera el dinero para la cuenta, que es de mil 500 a mil 700 pesos diarios.
"Nos afecta aplicar esos descuentos porque el patrón pide la cuenta completa y el carro también necesita dinero para la gasolina, sin gasolina no trabaja, y por eso a veces nos vamos con las manos vacías; aunque también es cierto que hay días buenos", detalló.
Por ejemplo, dijo, los días de lluvia, los periodos de vacaciones escolares y los cierres de vialidades repercuten en su economía, ya que hay días en los que durante un recorrido apenas logra trasladar a unas diez personas.
Refirió que la semana pasada, durante dos días, trabajó sólo medio día, ya que ante la disminución de usuarios, en su primer recorrido apenas reunió 90 pesos y 130 en el segundo, por lo que habló con su patrón para descansar esos días.