La administración anterior pagó 32 millones de pesos y dio por concluido contrato de obra de rehabilitación, aunque los trabajos están inconclusos.
El gobierno pasado dio por concluido el contrato de la obra de rehabilitación de naves del mercado Adolfo López Mateos y pagó 32 millones de pesos, aunque la obra no ha terminado, por lo que se promoverá la realización de una auditoría y, junto con el municipio de Cuernavaca, se atenderán las inquietudes de los comerciantes.
El secretario de Economía actual, Víctor Sánchez Trujillo, informó que la administración anterior canceló dicho contrato, al dar por concluida la primera etapa, aunque es evidente que no se terminó.
Dijo que se revisarán en el Fideicomiso de Competitividad las condiciones en que se firmó dicho contrato, las que se cancelaron, y el monto de inversión que faltaría para completar el proyecto, para luego tomar una decisión “junto con los involucrados”.
Explicó que ya se está buscando qué hacer con los comerciantes que están en el andén y que –naturalmente- están deseosos de regresar a sus lugares originales, además del tercer asunto, que es la venta especial de Día de Muertos y de navidad que habitualmente se colocaba en dicho andén, que está ocupado por los vendedores que fueron ubicados ahí mientas se realizaban algunos trabajos, no terminados.
Hizo notar que aun cuando el mercado, como instalación, es patrimonio del gobierno del estado, el ayuntamiento es el que administra ese centro comercial.
Aclaró que en el gobierno pasado se pagaron los 32 millones de pesos y dieron por terminada la primera etapa, pero es obvio que no fue así. “Evidentemente que no fue así. Yo he pasado por ahí y están tirados diferentes materiales, por decir lo menos. ¿Qué quiero pensar? que se hayan pagado cosas que todavía no ocurren, pues que se tendrían que hacer”, anotó.
Sánchez Trujillo aseveró que “es claro que ese proyecto no estuvo bien fundamentado, pues no se previeron cosas que era tan básicas como la electricidad, los drenajes. Tenemos documentos donde los comerciantes exponen, con sentido común, porque no son ingenieros, que decían: ‘donde nos van a poner las trabes son las entradas del mercado, es un absurdo. No puede un mercado de este tamaño ser obstaculizado en salidas, vamos a tener una bomba de tiempo ante un eventual problema de protección civil y no hicieron caso’”.
Calificó como buena noticia que el proyecto ejecutivo fue cancelado, y lo recuperable es que el gobierno del estado ya no tiene compromiso con esa empresa. En cuanto a los recursos disponibles en el fondo, aseveró que ese dinero deriva del impuesto del 2 por ciento a la nómina, no porque se hayan dejado recursos de ese proyecto.
Añadió que personal seguirá haciendo trabajos hasta que la Secretaría de Obras Públicas demuestre que ya terminaron con la obra.