Tras la muerte del Papa Francisco, usuarios en redes han recordado uno de los momentos más emotivos de su pontificado: aquel en el que consoló a un niño que lloraba por la pérdida de su padre.
El episodio ocurrió en abril de 2018, durante una visita del Papa a una parroquia en Roma. En el evento, varios niños tuvieron la oportunidad de hablar con él. Entre ellos estaba Emanuele, un pequeño que, al tomar el micrófono, se quebró y no pudo hablar. En medio del llanto, buscó consuelo en un sacerdote cercano. Fue entonces cuando el pontífice argentino lo animó:
“Dímelo al oído”.
El niño se acercó al Papa y, entre lágrimas, le confió una gran preocupación: su padre, recientemente fallecido, era ateo, y quería saber si estaba en el cielo. El conmovedor momento fue captado en video y rápidamente se volvió viral.
Con el permiso del menor, el Papa compartió la conversación con los presentes. Explicó que Emanuele había llorado por su padre con gran valentía, demostrando cuánto lo amaba. Luego reveló lo que le había preguntado:
"Si su padre, pese a no ser creyente, estaría en el cielo".
Francisco relató que el padre del niño no era religioso, pero había hecho bautizar a sus cuatro hijos, y que su hijo lo describía como un buen hombre. “Qué bonito que un hijo diga de su padre que era bueno. Es un testimonio hermoso”, expresó.
El Papa aprovechó para reflexionar sobre la misericordia divina. Preguntó a los asistentes: “¿Creen que Dios, que tiene un corazón de padre, abandonaría a un hombre así?”. La respuesta unánime fue no. Y agregó:
“Dios seguramente se sentía orgulloso de ese padre”.
Francisco concluyó su mensaje animando a Emanuele a seguir hablando con su papá y agradeció su valentía. A siete años de aquel encuentro, y tras el fallecimiento del pontífice, el recuerdo de aquel gesto de consuelo ha vuelto a tocar corazones en todo el mundo.