Son benévolos con la figura al gobierno estatal: Amado Orihuela, pero advierten que de no hacer caso a sus peticiones, el CEN estará entregando el estado a otro partido político al encontrar la derrota el próximo 1 de julio.
No sabemos qué tanta influencia o cuáles serán las consecuencias de esta manifestación y de las exigencias planteadas, pero su reclamo está basado en la falta de cumplimiento de los procesos que el propio PRI había acordado y dispuesto para la entrega de las candidaturas. Hay aspirantes que cumplieron con todos los requisitos ya acordados, son líderes y personajes que merecían por lo menos entrar a una competencia formal; haberles ignorado e impuesto a personas que ni siquiera cumplieron con los lineamientos, ha provocado que este lunes por lo menos 52 autobuses transporten a inconformes en lo que han llamado el “éxodo por la legalidad”.
Una vez más el PRI Morelos, pero ahora su militancia no su dirigencia o alguno de los grupos de control, son quienes expresan su malestar; ese es el corazón y alma de un instituto político. Esta muestra de descontento debe ser valorada desde el centro y advertir que el trabajo realizado por Joaquín Hendricks, Amado Orihuela, Manuel Martínez y Maricela Sánchez, no es el correcto ni el adecuado. La repetición de apellidos, las negociaciones entre los de arriba, la ignorancia de las fuerzas vivas del PRI, la distribución para los propios de los espacios de competencia, puede significar en Morelos para el tricolor, un retroceso grave.
Diputados voraces
Una vez más los integrantes de la actual legislatura buscan permanecer en sus puestos, cobrar hasta el último centavo, bloquear el arribo de sus suplentes, medrar a costa del pueblo, en un ejemplo más de la falta de sentido social y por el contrario, un mensaje claro de la manipulación de las leyes para su beneficio.
La Ley Orgánica del Congreso del estado autoriza a cada uno de los diputados a ausentarse de ocho sesiones consecutivas sin justificación; y la reforma al Reglamento Interior, permite al Congreso local sesionar una vez cada 15 días.
La jornada comicial suma 90 días, lapso en el cual –de lograrse el acuerdo de los coordinadores parlamentarios- existe la obligación de reunirse en el Pleno seis veces; el séptimo encuentro se daría pasado el 1 de julio. De esta forma los legisladores que no resulten triunfadores podrán acudir a la séptima cita y nada habría pasado; su salario mensual se les tendría que respetar a pesar de la carencia de trabajo y ladina actitud.
De acordar este abuso, la sociedad toda está obligada a rechazar a cualquiera que haya cruzado por el Congreso en esta etapa, ante el abuso, exceso, manipulación y robo descarado que estarían convalidando. Los suplentes mientras tanto, son tan sólo observadores y suspirantes menospreciados, maltratados y pisoteados.
Bolaños diputado
Siempre hábil en las lides políticas, Javier Bolaños Aguilar, logró la posición número tres plurinominal al Congreso del estado por el Partido Acción Nacional; el actual subsecretario de gobierno, finalizará esta función esta misma semana para integrarse al ejercicio de campaña que por tercera vez lo ubicará como actor importante en las relaciones públicas y en los amarres de negociación delicada.
Durante la lucha por el arribo hacia el poder de Marco Adame, Bolaños Aguilar fue actor cercano y fundamental en diversos temas. Junto a Javier López Sánchez y Víctor Sánchez Trujillo, generaron una terna de negociaciones y blindaje del candidato de Acción Nacional.
Si bien es cierto que no es un personaje cercano al candidato Adrián Rivera Pérez, tampoco lo es lejano. Su paso por la titularidad de la CEAMA, su experiencia en la Cámara de Diputados federal, el abandono de su partido en 2009 para obtener una oportunidad, su inclusión en el gabinete en un segundo nivel como subsecretario, lo han hecho un hombre conocedor del éxito, de la batalla y del padecimiento.
Estas características y antecedentes, seguramente lo ubicarán de nueva cuenta, en las primeras filas y en la estrategia de la campaña gubernamental del PAN. Todo apunta a que la terna ahora podría integrase en esa dinámica una vez más con Javier López Sánchez y Luis Miguel Ramírez Romero.
En esta ocasión tiene todo por ganar y nada que perder: si el PAN triunfa seguramente alcanzará una curul, si por el contrario se obtiene un segundo lugar, su espacio estará reservado en la siguiente legislatura.