La mañana de este viernes, en conferencia de prensa, Rivas Ríos junto con representantes de organizaciones sociales como la Comisión Independiente de Derechos Humanos y del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad Ignacio Suárez Huape, denunció que alrededor de las 06:30 horas de este viernes, fue baleada la casa de su madre Carmen Ríos, ubicada en la calle Nayarit, en la colonia Flores Magón de esta ciudad.
Del ataque, quedaron como saldo y prueba, los orificios de bala, uno de estos en el portón, otro más en un vehículo propiedad del yerno del dirigente, y otro más en la ventana que incluso, perforó el televisor.
“Esto coincide, porque el 9 de agosto, como ya lo denunciamos, me llamaron por teléfono y me dijeron que le parara o iba a pagar las consecuencias, y me dijeron que me dejarían un regalito en casa de mi mamá”, expresó al apuntar que “los únicos que han sido afectados en sus intereses personales, son los transportistas, cuando anunciamos la conformación del frente contra el alza y anunciamos la manifestación, inmediatamente después se dieron las amenazas”.
Acusó que el gobierno del estado ha hecho caso omiso, por lo que también tiene su grado de responsabilidad, toda vez que se hizo la denuncia en su debido momento y no han hecho nada. “No dudamos que esa omisión la hagan de manera consciente, porque a ellos igual que a los transportistas les estorba que realicemos estas actividades en contra del alza, yo he escuchado que hay intereses mezclados y que la dirección de transporte está plagada de corrupción”.
Cabe recordar que diversas organizaciones incluso internacionales como Amnistía Internacional, o como representantes de asambleas del movimiento estudiantil #YoSoy 132, reprobaron las amenazas previas y acordaron que se pusieran en marcha ciertas medidas cautelares para protegerlo, junto con su familia, pero estos llamados no han sido atendidos, acusó.
Rivas Ríos apuntó que de igual forma ampliará su denuncia, al referir que existen otras personas que podrían estar interesadas en frenar que él siga como luchador social, como lo son los comuneros de Chapultepec, quienes se declararon en su contra de él, por la denuncia que hizo “porque ellos pretenden dizque regularizar los predios cuando tenemos esos terrenos desde hace 70 años, y lo que ellos quieren es recursos económicos”.
Advirtió que no habrán de dejar las protestas contra el alza en la tarifa, porque “alguien tiene que alzar la voz y fue notorio, porque no hubo balazos en ninguna otra casa, fue la de mi familia”.
Movilizaciones contra el alza en el pasaje
Este mismo viernes, al medio día, integrantes del Frente Estatal Contra el Aumento a la Tarifa del Transporte, se manifestaron en el palacio de gobierno, donde repudiaron la agresión a Gabriel Rivas Ríos y exigieron a las autoridades que no se aplique aumento alguno a la tarifa.
Ignacio Suárez Huape del Movimiento por la Paz y la Justicia con Dignidad, expresó que las autoridades estatales son cómplices de estos hechos, al ignorar las alertas que realizaron diversas organizaciones solicitando medidas cautelares, lo que estaría poniendo al descubierto una red de corrupción en ese sector, donde hay intereses de funcionarios y concesionarios que son trastocados en defensa del pueblo.
Por su lado, el presidente del Frente estudiantil Universitario Ciudad de la Esperanza “FUCE” Edgar Iván Domínguez, advirtió que integrantes de su organización también han sido amenazados y tampoco ha habido respuesta oficial.
Consideró que el ataque preocupa a todos los miembros que están en esta lucha contra el aumento a la tarifa y por tanto reclaman medidas de protección para todos.
Aseveró que de ninguna manera habrán de aceptar un aumento a la tarifa, ni siquiera de un peso como lo han planteado los transportistas, que aseguraron que podría entrar en vigor el 29 de agosto. Edgar Iván informó que de aplicarse esta decisión gubernamental, recurrirán al amparo para echar abajo ese incremento.
Bloqueo de calles
Este mismo viernes, integrantes del frente, luego de la manifestación a las afueras del palacio de gobierno, bloquearon por casi dos horas las calles de Gutemberg y Galeana, y posteriormente cambiaron el bloqueo a la avenida Morelos, donde hubo intercambio de gritos con algunos automovilistas inconformes con el cierre de la circulación.
Más tarde, retiraron el bloqueo que habían ubicado a la altura del cine Morelos y caminaron hasta la avenida Morelos, pero a la altura de Las Palmas, unos metros más adelante de la glorieta del Niño Artillero. Ahí, se colocaron en hilera con pancartas, como manifestación y actividad de información, con el fin de que la ciudadanía esté enterada de lo que pretenden hacer las autoridades y concesionarios.