Mónica Pineda Antúnez, delegada del instituto en Morelos, detalló que una de las maneras para recuperar estas mil viviendas es a través de un programa administrativo de ejecución con los ayuntamientos, que son autoridad fiscal, y al no pagar el predial, se pueden recuperar estas viviendas de manera más ágil y rápida.
La otra forma, dijo, es a través de un juicio hipotecario, “por lo que estamos promoviendo mayor agilidad y criterios diferenciados para la vivienda acreditada con el tribunal, para que éstas se puedan ocupar por trabajadores morelenses, ya que el estimado que tiene el Infonavit, es que hay alrededor de 68 mil trabajadores que califican para un crédito, y que no hemos podido atender porque sus necesidades de la oferta de vivienda, no es adecuada a su capacidad de pago, ni la ubicación se adecúa a sus necesidades, por ello estamos trabajando con el gobierno estatal y municipales para precisamente generar condiciones de viviendas mejor ubicadas”.
Y es que dentro del análisis que se ha realizado, es que “hay mucha vivienda abandonada porque se ha construido para trabajadores de entidades del Distrito Federal por la vocación turística del estado y su cercanía con esta ciudad, por eso tenemos que hacer una política pública diferenciada para poder atender la demanda local”.
A la fecha, están por recuperarse 200 de esas mil viviendas en los municipios de Cuautla, Ayala, Jiutepec y Emiliano Zapata, y el estado físico de estos inmuebles es variado: “hay unas que están más bandalizadas que otras, aunque están bien ubicadas y tienen un buen entorno urbano; y el valor no es mayor a 400 mil pesos”.
Sin embargo, precisó que “en algunas viviendas se va a tener que hacer alguna remodelación, con un programa con el que cuenta el Instituto, el cual combina un crédito hipotecario para adquirir una vivienda usada, unido a un producto de remodelación de dicha vivienda”.