“Requerimos aplicar primero medidas preventivas y no coercitivas”, enfatizó José de Jesús Pérez Moreno, secretario de la institución, al enfatizar que “el objetivo no es la multa por la multa misma, sino una solución de la deficiencia, porque si tú te la pasas multando, al final tienes que regresar a ver si se corrigió o no se corrigió, y se vuelve a multar”.
Por lo que consideró que primero se debe dar la oportunidad a que empresarios cumplan con los ordenamientos legales, sobre todo en el área de seguridad e higiene, pero también dijo: “habrá que ver si tienen sus programas de capacitación implementados; si no están pagando menos de los mínimos legales; en qué condiciones laborales están los trabajadores y darles la oportunidad de que corrijan sus deficiencias antes de multarlos”.
“Y si después de ello hay negligencia, entonces sí habrá que multarlos”, dijo.
Pérez Moreno también hizo referencia al tema de la capacitación y las competencias laborales que se requieren en el Estado, señalando que “una vez que tengamos el presupuesto para el próximo año, uno de los objetivos no será sólo capacitar sino certificar en competencias laborales, para que a esos trabajadores capacitados y certificados les ayudemos para que puedan implementar alguna cooperativa o pequeñas empresas, para que “de alguna forma su capacitación no se diluya sino que se aproveche en un ente productivo que les permita tener un empleo”.