Manuel Bárcenas Jiménez, presidente de la cámara en mención, respondió que “entre un cinco y ocho por ciento se aumentarán las cartas, aunque muchos restaurantes hicieron esfuerzos para mantener los precios pese al aumento de insumos y gasolina, pero para este año ya no es posible, dado los incrementos que se anunciaron en la Reforma Hacendaria donde productos de alto contenido calórico subirán de precio, por lo que nos vemos obligados a tener que incrementar en ese porcentaje los menús”.
Por su parte, algunos otros restauranteros mencionaron que justamente con el aumento del pan dulce y el refresco o bebidas endulzadas, “el consumidor es quién pagará esta situación, por lo que estamos valorando lograr tener el tipo de pan que cuente con las especificaciones que no pasen de 275 calorías y de 100 gramos, y aunque en algunos negocios sí lo aumentarán, nosotros lo vamos a absorber igual que el de las bebidas porque no podemos cargarle al cliente ese aumento”.
Otro empresario del ramo mencionó que “trataremos de usar menos azúcar en bebidas frescas que hagamos en el negocio y en el caso de los refrescos, nos parece bien que aumente el precio para que la gente consuma menos este tipo de productos que son dañinos para la salud, pero de nuestra parte no subiremos el precio de las sodas, aunque sí estamos analizando el aumento en otros productos de la carta, dado que todos los meses sube la gasolina y entrando el año todo tiende a subir”.