Agrupaciones como Acción Ecológica A.C., Madre Tierra A.C., Índice Ambiental A.C., Servicio de Paz y Justicia, SEPAJ, el Centro de la Tierra Cultura Ambiental, Fundación Doster A.C. y Guardianes de los Árboles, informaron que durante muchos años los árboles de Cuernavaca han sido seriamente afectados por “desmoches” (podas severas donde se despoja de su follaje al árbol dejando sólo los muñones).
Explicaron que la Dirección de Parques y Jardines, la Comisión Federal de Electricidad, Teléfonos de México y otras empresas o instituciones que tienen que ver con extensión de cables aéreos, son los principales causantes de esta cotidiana afectación a los árboles de la ciudad, patrón de conducta que ha sido copiado por la ciudadanía.
“El mal ejemplo ha sido generado principalmente por la Dirección de Parques y Jardines, por lo que actualmente se pueden apreciar por toda la ciudad árboles desmochados, tanto en la vía pública como en predios particulares”, argumentaron en un documento.
Y es que de acuerdo a la Asociación Internacional de Arboricultura (ISA, por sus siglas en inglés), los desmoches generan daños irreversibles a los árboles, causándoles una eventual muerte a la mayoría de las especies; por lo que sugiere una técnica específica de poda que no daña a los árboles, sino que por el contrario los mantiene saludables.
Por lo anterior, propondrán crear una norma técnica que especifique claramente los conceptos de poda adecuada, así como la protección y conservación de los árboles y también para afianzar legalmente la protección de éstos, ya que a pesar de que se ha logrado un avance en cuanto a que el Reglamento de Ecología no permite que se practique el desmoche, éste no es respetado por las mismas autoridades obligadas a observarlo, específicamente por la Dirección de Parques y Jardines.
Recordaron que hace ya varios meses entregaron a Martín García Cervantes, secretario de Infraestructura Urbana, Obras y Servicios Públicos, un escrito donde las organizaciones civiles pidieron que la Dirección de Parques y Jardines haga valer los artículos cinco y 51 del Reglamento de Ecología y Medio Ambiente, pues de lo contrario advierten que presentarán una demanda por daños ambientales y violación a la Normatividad Ambiental Vigente en el municipio.