La legisladora perredista Hortencia Figueroa Peralta confirmó la intervención del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria y del alto comisionado de las Naciones Unidas, Alberto Brunori, ante el gobierno federal dada la negligencia e impunidad que persiste en el caso de Rubén Flores y de Miguel Ángel Pérez Cázarez, ejidatario de Santa Catarina, asesinado por defender las tierras de la reserva ecológica de El Texcal, zona boscosa que une a Tepoztlán y Jiutepec”.
Los comuneros de Coajomulco responsabilizaron a Porfirio Díaz Cedillo de las amenazas y exigieron la intervención inmediata de la autoridad, pues están en riesgo las vidas de 15 vigilantes comunitarios del bosque y pobladores de la comunidad que han expresado su decisión de detener la destrucción del bosque.
Denunciaron que los talamontes operan con total impunidad en la zona de Huitzilac y venden a las carpinterías la madera para la producción de los muebles rústicos.
Agregaron que ninguna autoridad estatal ha hecho nada por detener a los responsables del crimen de Rubén Flores, bajo el argumento de que el asesinado es competencia de la Comisión de Delitos del orden federal.
Hortencia Figueroa, tras señalar que es preciso reivindicar el nombre de Rubén Flores, “valiente y digno luchador en defensa del medio ambiente”, dijo que es importante que se le ofrezca seguridad a todos aquellos que han sido amenazados por cuidar el medio ambiente.