“Su señoría por la delicadeza del asunto le pido a usted que por favor la testigo rinda su declaración a través de una cámara, por la delicadeza del asunto, pues ella también es víctima”, pidió la encargada de la Unidad Especializada Contra el Secuestro y la Extorsión al momento de iniciar la audiencia del martes 14 de julio.
José Ángel, Galindo, Benito, Gilberto, Luis Alberto y Rey tienen cargos en su contra, por el secuestro de un comerciante vendedor de cecina cometido el 10 de marzo del 2013 en la colonia Tamoanchán en el municipio de Jiutepec.
La petición de la fiscal de que la testigo no declarara en la sala, tomó por sorpresa a los jueces del tribunal, quienes tuvieron que deliberar para determinar si era o no viable tal petición.
Los defensores particulares de los imputados se opusieron porque indicaron que apenas un día antes la Fiscalía ofertó sus pruebas a desahogar en el juicio oral, pero que nunca refirió que la testigo era víctima, ni mucho menos que tenía que declarar ante una cámara.
“La Fiscalía tendría que haber dicho con anterioridad la calidad del declarante, así que no es procedente su petición”, indicó, sin embargo la ministerio público pidió que si no era posible que declarara de esa manera, entonces que la declaración se llevara de manera privada por lo delicado del interrogatorio y pidió que el público desalojara la sala, lo que sí fue concedido por el órgano jurisdiccional.
El juicio que enfrentan los seis jóvenes ha transcurrido en una serie de errores que pudieran contribuir a la libertad de los imputados, ya que el pasado lunes en la audiencia intermedia, cuando eran leídos los antecedentes del caso, el juez presidente Edie Sandoval Lome fue avisado que los testigos que iban a rendir su declaración estaban dentro de la sala y en ese momento ordenó que salieran, sin embargo los abogados defensores se quejaron porque el proceso ya fue contaminado porque los testigos no deben tener ningún antecedente.
Sobre el caso se informó que tres personas armadas el pasado 10 de marzo del 2013 interceptaron al comerciante y tras someterlo lo trasladaron a una casa de seguridad, en donde permaneció cautivo.
Las audiencias continuarán en los próximos días cuando se presentarán declaraciones y pruebas de ambas partes que deberán ser valoradas por el tribunal que determinará la responsabilidad de los acusados.