“Este festival está en un contexto de violencia, corrupción y de impunidad que hoy padecemos en todos los ámbitos de la vida cotidiana, tanto como la oprobiosa desigualdad, la pobreza, la injusticia y la marginación en las que se encuentran dos terceras partes de la población del país”, dijo Vera Jiménez, al insistir en que los artistas y creadores del país requieren de apoyo para continuar dando esperanza a todas las poblaciones.
Vera Jiménez insistió en la necesidad de terminar con este horror inhumano. “Con el dolor incesante de las miles de víctimas de la violencia criminal, de la inseguridad y del abandono social que demanda con urgencia emprender juntos caminos inéditos que contribuyan a recuperar nuestra casa común, a partir del aliento de transformación que está surgiendo desde los corazones fraternos de tantos y tantos mexicanos, con artistas y músicos que con su expresión, su palabra y su voz, tratan de construir un mundo diferente para todos nosotros”.
Con este primer festival de música cultural de música tradicional, explicó el rector de la UAEM: “Se dan los pasos iniciales de un largo recorrido para forjar los conceptos, prácticas y líneas estratégicas de acción necesarios para entender y enfrentar la crisis civilizatoria que nos agobia. Avanzando juntos en la resistencia actual, que se convierte ya en una fuente de cambio, de esperanza y de inspiración para quienes compartimos la tarea impostergable de contribuir a generar desde abajo, desde el suelo, desde los artistas que no tienen esos grandes presupuestos y subsidios de las empresas patrocinadoras, un suelo social diferente, con seres humanos que realmente se amen y busquen una vida digna y productiva para toda nuestra población”.