“En la Miguel Salinas están cerrando el centro de trabajo y los compañeros están preocupados por su fuente de trabajo. Vamos a exigir que se respete, porque la universidad ha mencionando que se encontraron grutas debajo de lo que es este edificio y hay residuos de aguas negras y se dice que pasa un río subterráneo. Vamos a esperar, regresando de vacaciones para ver qué dictamina la universidad y qué va hacer con los compañeros si se mantiene la reubicación o ver qué pasa”, expuso Moisés Rueda Romero, secretario general del STAUAEM.
Y es que las labores de restauración del edificio de la biblioteca pública “Miguel Salinas”, ubicada en el centro de Cuernavaca, propiciaron el cierre temporal de la misma y la reubicación del personal que atiende a la única biblioteca pública del centro de la capital.
Rueda Romero advirtió que no permitirán que se rescinda el contrato de los bibliotecarios bajo el argumento de un posible cierre del inmueble, “lo que procede es que se reubiquen en caso de que la biblioteca se deba cerrar definitivamente. Nuestra propuesta es que esa siga permaneciendo abierta al publico y ojalá no haya riesgo y la infraestructura siga para el mismo fin en beneficio de la comunidad”.
Por otra parte, el secretario general del STAUAEM dio a conocer que todavía existen pendientes en los que la UAEM tiene que resolver de la pasada revisión de Contrato Colectivo de Trabajo, entre los que mencionó que se encuentran en análisis del catálogo de puestos y de plazas de confianza, además de que se ha exigido un incentivo por riesgo de trabajo.
“Estamos dispuestos a que en cualquier momento para subsanar los pendientes, esperamos que al regreso de vacaciones podamos coordinarnos para atender lo que nos preocupa con la UAEM, además de lo que implica una posible reforma laboral que nos mantiene a la expectativa”, concluyó.