Una vez más, un recurso legal promovido por la Uclat ha permitido que los vehículos irregulares presten el servicio y podría ser por varios meses o años más, si la defensa de esta agrupación logra alargar el proceso.
Ante esto, la Dirección de Transportes suspendió los operativos contra los taxis de la Unión de la Clase Trabajadora hasta que no se resuelva el amparo contra el Tribunal de lo Contencioso Administrativo, que resolvió la no regularización de 155 unidades.
Las primeras dos semanas de arranque de los operativos de supervisión detuvo a cerca de 17 unidades “pirata”, más de la mitad pertenecían a la Unión de la Clase Trabajadora y las tuvo que liberar a las dos semanas por un recurso de queja que la organización interpuso, al señalar que se violentó la ley ya que los vehículos cuentan con un amparo federal.
Para el líder de la Uclat, Víctor Mata Alarcón, el proceso legal podría durar uno o hasta tres años, porque presentarán más pruebas a su favor, supuestamente. El primer juicio promovido ante el Tribunal Superior de Justicia duró cerca de cinco años, pues la defensa de la organización de taxis buscó alargarlo mediante pruebas y otros recursos legales.
Sin embargo, Mata Alarcón dijo que exigirá los mismos derechos que un concesionario y buscará que sus vehículos pasen la Revista Mecánica para demostrar que son unidades en buen estado y que su servicio es de calidad.
Según el líder de la Unión de la Clase Trabajadora menos del 10% del padrón de vehículos requerirá cambio, el resto son modelos nuevos, algunos hasta del 2010 y lo comprobará con la Revista Mecánica.
“Pediremos que nos dejen hacer la Revista Mecánica para demostrar que tenemos mejores unidades que otras agrupaciones, aún cuando se han negado a regularizarlas”, añadió Mata Alarcón.