Morelos se ubica en los primeros lugares de consumo de drogas legales y en los últimos años la adicción ha crecido en mujeres y niños, lo que obliga a una revisión sobre los factores y a aspectos tales como las condiciones que guardan los albergues o centros de rehabilitación.
Estos fueron algunos de los planteamientos que se presentaron en el Congreso Nacional de Adicciones y Familia, Perspectivas y Soluciones, que se realizó este viernes en el Museo de la Ciudad de Cuernavaca, en el que participaron más de 40 especialistas en el tema.
César Guerra Sánchez, coordinador de dicho congreso, explicó que el objetivo de foros como éste es generar espacios de discusión y análisis, reflexión e información para los diferentes públicos que conforman la sociedad civil y que se empiecen a abordar todos los temas relacionados sobre las adicciones y las familias que viven con miembros que tienen dichas adicciones.
Destacó que los resultados de varias encuestas oficiales recientes, como la Encuesta Nacional de Adicciones, ubican al estado entre los primeros lugares en consumo explosivo de drogas, como el alcohol, la cocaína y la marihuana.
Además, destacó que en la última década aumentó la tasa de consumo en mujeres y adolescentes, lo cual debería implicar más investigación sobre sus efectos. El tema de las adicciones es un asunto de salud pública que no es exclusivo de Morelos sino de México y como tal debe ser tratado.
También destacó la importancia de regular los lugares de atención como las "granjas" o centros de rehabilitación. Y es que los expertos insistieron en que son insuficientes los servicios eficaces y vigilados adecuadamente, para atender las adicciones.
César Guerra dijo que otra de las conclusiones es que hay muchos espacios no registrados, aunque Morelos ocupa el primer lugar en cuanto al número de centros de rehabilitación.
Destacó que el objetivo del Congreso no fue abordar el tema de la seguridad y su relación con el narcotráfico, el cual está arrojando números dramáticos de personas muertas que seguramente, las drogas no habrían causado en todos estos años. “Por eso creemos que eso se tiene que replantear y que el análisis sobre las drogas debe darse desde la investigación y la salud y no sobre el combate a la delincuencia”.
Destacó también que las encuestas nacionales reflejan que los jóvenes han comenzado a tener contacto con el alcohol a los 13 años, que es una droga legal que sirve de puerta de acceso a otras drogas. En otros estudios se habla de que el inicio es a los 10 años: "esto nos habla de una sociedad enferma, que se ha normalizado y promovido el consumo de alcohol en menores de edad y si sumamos a ello la falta de regulación por parte de los municipios, vemos una venta indiscriminada".