El momento del anuncio, a un año de la elección y meses de distancia de las definiciones de las candidaturas, habla de un acto bien pensado, medido, estructurado y por supuesto –porque así se trabaja en política- con un definido apoyo, en este caso, a favor del movimiento que encabezan Andrés Manuel López Obrador y Alejandro Encinas.
Decimos que no es menor el hecho, mucho menos aislado, porque estos liderazgos mantienen seguidores y una alta carga ideológica. Pareciera que ante la superficialidad con que la política, las candidaturas, las campañas y las formas de gobierno actuales se desarrollan, un mensaje de este tipo no calará y mucho menos trascenderá en las conciencias de las generaciones añejas y las que votarán por primera vez.
Sin embargo, hacer eco, de una denuncia como la que Rivas Ríos presenta ante la sociedad, debe ser obligatorio por el manejo irregular o equívoco de los dineros públicos como se señala; ante la ausencia de democracia que se advierte existe y permanecerá en una institución que se estructuró exactamente para promoverla y defenderla; por el alejamiento a los principios, a los valores, a las bases ideológicas, sin las cuales no puede haber nada, absolutamente nada y mucho menos estrategia de gobierno.
Desde hace 23 años, como él mismo lo hace notar en su mensaje de renuncia, militó en las filas del Partido de la Revolución Democrática y por ello, explicó, “no podía continuar haciéndome el occiso como si no pasara nada”.
“La pérdida de valores y principios que son elementales en el PRD -detalló- por estar en la ilegalidad y no garantizar un proceso democrático para sus militantes” fue motivo superior para presentar su renuncia con carácter de irrevocable al partido político que desde 1988, al lado de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, impulsara en Morelos.
Las acusaciones hacia la dirigencia perredista no son menores: se corrompe la conciencia de la sociedad, se aprovecha la necesidad, la miseria y el hambre del pueblo para humillarlo pagándole una despensa o un dinero a cambio de que se afilie al partido para que, en su momento, vote por el candidato o candidatos que la cúpula decide.
“Sólo les dijo a quienes compran conciencias, que quien se vende por una despensa se puede vender por una cantidad mayor a quien se la ofrezca; de nada le servirán al partido los afiliados que se obtuvieron de esa manera”.
Más que la renuncia, el mensaje de Gabriel Rivas Ríos debe ser escuchado por supuesto por quienes militan en el Partido de la Revolución Democrática, sus seguidores y simpatizantes, pero también deben abrir sus oídos los del Partido Revolucionario Institucional, de Acción Nacional, Convergencia, Verde, Nueva Alianza, del Trabajo y el Social Demócrata, y cuestionarse sobre estos señalamientos. ¿En verdad –amable lector- esta carta de renuncia podría caber en cualquiera de los institutos políticos hoy representados en Morelos? Nosotros consideramos que sí.
Gabriel Rivas es contundente: “Cuando se ha abandonado al pueblo en sus demandas más sentidas y se dilapidan los recursos de las prerrogativas en campañas mediáticas, para hacer creer a todos que se está haciendo algo cuando en realidad no se hace nada en beneficio de la militancia”, no se puede cerrar la boca.
“Predomina el pragmatismo y los intereses mezquinos de los grupos que buscan seguir repartiéndose el botín de las prerrogativas, por lo que la mayoría de los fundadores han abandonado sus filas decepcionados de lo que queda de ese instituto que por alguna vez aglutinó a los cuadros más valientes de la izquierda y que fue la esperanza del pueblo mexicano”.
Exactamente eso, la esperanza –nos lo repiten expertos sociólogos, aunque ya es voz común- no la pierde el pueblo de México. Una esperanza, que año con año, motivada por fiestas pagano-religiosas; cada tres, con la renovación de congresos y ayuntamientos, y cada seis, con los mandos estatales y el Presidencial, se mantiene y revive, a pesar de la traición conjunta de los actores políticos. Los menos, aquellos liderazgos que se alejan de estos esquemas, están destinados a emprender nuevos caminos, a retomar el origen de sus movimientos; sin embargo, muchas veces la vitalidad y el cansancio no les permite consolidarlos; esperemos no sea el caso de Rivas Ríos.
El augurio y la alerta la planteó el ex perredista: “La actual dirigencia se mantendrá en el cargo pese a los malos resultados logrados en las elecciones de 2009, el nulo trabajo político que se ha realizado y el alejamiento de las causas y el sentir del pueblo morelense”.
Por supuesto que los hoy encargados del destino del PRD, Juan Ángel Flores Bustamante, su equipo, y abiertos líderes como Graco Ramírez Garrido Abreu, Fidel Demédicis, y algunos otros, minimizarán el hecho y lo harán notar con una mera visión de apoyo a favor de Andrés Manuel López Obrador. En ello, tal vez quepa algo de razón; sin embargo, no se puede ignorar y mucho menos solapar, de ser ciertos, los señalamientos y acusaciones, hechos públicos por un hombre que independientemente de sus aspiraciones o compromisos políticos, queremos pensar, se basa más en la madurez, proyecto de vida y de nación.
El eco del mensaje, más que la renuncia, debe llegar a esos nuevos votantes, a aquellos que estrenarán su credencial de elector en la próxima jornada. Ésta es una forma de exigir, o exigirnos como sociedad, que quienes tienen la oportunidad y compromiso de gobernar, deben ser congruentes y respetuosos de los principios, valores y proyectos que enarbolan.
Al aire
Hoy serán dados a conocer los nombres de los galardonados con el Premio Estatal de Periodismo 2011; el Consejo de Premiación integrado por los periodistas Omar Guerra Melgar, Leopoldo Ferreiro Morlet, Daniela Serna Herrera, Jorge Medina Palomino y quien esto escribe, Teodoro Rentería Villa, junto con la visión social de la magistrada Nadia Luz María Chávez Lara y Javier Malpica Marines, permitió un análisis de fondo sobre los trabajos presentados. Las discusiones no fueron ajenas pero el voto unánime se logró después de rondas de votación.
La ceremonia de premiación será este martes 7 a las 9 de la mañana en la sede del Congreso del Estado. La Lic. Margarita Aguirre Castillo, por invitación y decisión del consejo, conducirá el mismo.
A los reconocidos les reiteramos nuestro respeto. A quienes participaron, nuestro mensaje de solidaridad ante la calidad de sus trabajos. Para aquellos que no se enteraron, decidieron no acercarse, o no creen en este ejercicio, nuestra convocatoria para presentar sus trabajos en futuras ediciones; ésa es la forma de enaltecerlo y perfeccionarlo.