Explicó que las quejas son turnadas y canalizadas a la Subprocuraduría de la Defensa del Menor y la Familia o a las Instancias de la Mujer del municipio correspondiente, a fin de que se dé el procedimiento adecuado a la queja y la víctima reciba la atención requerida, principalmente cuando las mujeres con sus hijos tienen que ser protegidos hasta que se solucione la situación jurídica y se garantice su seguridad.
Navarro Uribe refirió que a la fecha registran un total de 20 quejas de mujeres que sufren algún tipo de maltrato físico, principalmente por sus parejas; o bien, que son víctimas de violencia patrimonial. Casos que, a diferencia del año pasado, han ido en incremento.
El visitador de la región sur aseguró que a todas la quejas se procede a buscar la conciliación entre la parte quejosa y el agresor, con ciertos señalamientos que ambas partes tienen que comprometerse a fin de resarcir el daño y sobre todo, garantizar la seguridad de la parte agredida; asegurando que un 80 por ciento de las quejas logran conciliarse, por lo que exhortó a la ciudadanía a denunciar cualquier abuso a esta instancia para hacer valer sus derechos.
Por otra parte, el visitador lamentó que de igual modo se incrementen las quejas de adultos mayores. “Se tienen siete quejas en lo que va del año de adultos mayores en contra de los propios familiares, quienes atentan contra sus derechos, mientras que el año pasado sólo se recibieron cuatro casos por este hecho, situación que es lamentable –dijo– para este sector de la sociedad.