Aseguraron que se quedaron desamparados ante la forma en que fueron dados de baja
Amacuzac.- Poco más de 10 elementos de Tránsito, Protección Civil y de rescate del Ayuntamiento de este lugar fueron despedidos de manera injustificada y sin determinar su liquidación, además de que previo a ello fueron retenidos por más de 12 horas en la base de la policía del municipio por elementos de la Policía Morelos. Esto lo denunció un grupo de familiares de los uniformados afectados, quienes lamentaron el trato arbitrario que les dieron.
Los familiares de los exelementos de la Policía de Tránsito de Amacuzac llamaron a las autoridades competentes a revisar el tema, ya que son familias las que se han quedado en el desamparo, pues no se les da certeza de que serán liquidados.
De manera anónima por temor a represalias, el grupo de inconformes calificó de injusto el trato que se les dio a los elementos de Tránsito el pasado miércoles, ya que desde la tarde noche de ese día dejaron de saber de sus familiares.
"Tratamos de comunicarnos con ellos, como siempre cuando están en turno, pero no contestaban los celulares, tampoco contestaban en la base de la policía. Ya por la noche los familiares comenzamos a reunirnos en la entrada de las instalaciones de la comandancia y fue cuando nos dimos cuenta de que estaba resguardada por policías del Mando Único o Policía Morelos, todos armados, impedían el paso y no daban información de cómo estaban nuestros familiares. Nos pedían que nos retiráramos, que les estaban haciendo exámenes, que estaban bien, pero fue hasta el mediodía del jueves cuando se nos permitió que les pasáramos agua y alimentos", dijo uno de los familiares.
Uno de los policías de Tránsito -de manera anónima- comentó que se les obligó a firmar su renuncia, les revisaron los celulares (incluso a algunos no se los devolvieron), los cuestionaban sobre temas relacionados con la delincuencia y finalmente los liberaron por la tarde sin darles información sobre su liquidación o el pago de los días trabajados de esta quincena.
Los inconformes lamentaron el trato que recibieron sus familiares y la forma en que los despidieron, ya que incluso durante el tiempo que se desempeñaron como elementos de Tránsito recibían un salario mensual de cinco mil pesos, no contaban con armamento ni equipo en buen estado, mucho menos recibían uniformes.
También aseguraron que son personas que trabajaban por necesidad y no tienen ningún vínculo con el crimen organizado, como se ha empezado a especular en el municipio luego de la detención del alcalde con licencia Jorge Miranda Abarca.
"Incluso durante esta campaña el alcalde que buscaba reelegirse amenazaba con despedirlos si no se unían a su campaña. Nuestros familiares son personas de trabajo, que arriesgaban su vida en este trabajo porque estando ahí la hacían de todo y hoy los despiden sin darles certeza de nada, sin prestaciones. Si estuvieran relacionados con malas cosas, no estaríamos preocupados por la falta de liquidación ni viviríamos en las condiciones humildes en las que vivimos", dijo otro de los familiares.
Aseguraron que analizan realizar alguna denuncia por esta situación; sin embargo, temen por la seguridad de ellos y sus familiares ante el trato que han recibido por parte de los elementos de la Comisión Estatal de Seguridad Pública, quienes han tomado el control de la seguridad en el municipio.