El alcalde de Mazatepec (municipio sede) señaló que la celda que se utiliza tendría capacidad para recibir desechos alrededor de un año más.
Mazatepec.- Autoridades de este lugar informaron que es urgente construir una nueva celda para el depósito de residuos sólidos en el Relleno Sanitario Regional Poniente, ubicado en el ejido de “El Jabonero” de este municipio.
El pasado viernes, representantes de la Secretaría de Desarrollo Sustentable (SDS) y autoridades electas de Coatlán del Río, Mazatepec, Miacatlán y Tetecala se reunieron para abordar la crítica situación del relleno sanitario.
Durante la reunión se subrayó la urgente necesidad de construir una nueva celda de residuos para garantizar la gestión adecuada de los desechos que se generan en los municipios antes citados, integrantes del organismo operador de este espacio.
El alcalde de Mazatepec, Jorge Toledo Bustamante, informó que la celda actual tiene una capacidad limitada que sólo permitirá su uso por aproximadamente un año más debido al incremento en el volumen de desechos recibidos y la sobrecarga ocasionada por residuos de municipios vecinos.
El edil comentó que ante esta situación se hace imprescindible la construcción de una nueva celda con una vida útil proyectada de entre ocho y diez años.
Toledo Bustamante destacó que la administración pasada permitió la entrada de más de diez mil toneladas de desechos de los municipios de Cuernavaca, Xochitepec y Temixco, lo que aceleró el agotamiento de la celda actual.
Actualmente el relleno recibe alrededor de 70 toneladas diarias de desechos de Coatlán del Río, Tetecala, Amacuzac, Mazatepec y Miacatlán, con un costo mensual de operación que supera los 38 mil pesos, incrementado –en el caso de Amacuzac porque vierte más desechos– en 50 mil pesos.
El alcalde Jorge Toledo Bustamante hizo un llamado a los alcaldes electos para que presenten una solicitud formal para la construcción de la nueva celda.
La propuesta es que una vez que asuma el cargo la gobernadora electa, Margarita González Saravia, se priorice este proyecto para que esté en funcionamiento dentro de uno o dos años, garantizando así una solución sostenible a largo plazo para la gestión de residuos sólidos en la región poniente.