Los vecinos afectados por el estancamiento de aguas negras en las calles Porfirio Díaz y Guadalupe Victoria de dicha colonia, reprocharon la actuación del comisiariado ejidal de la comunidad de Xoxocotla Romualdo Contreras Valencia, quien de manera intransigente la semana pasada se presentó con maquinaria y personas para tapar la descarga del colector a la barranca y posteriormente tapó con cemento y arena dos de las principales ollas del mismo colector, lo que provocó el estancamiento en fosas al aire libre de las aguas negras de toda la colonia, convirtiéndose así en un foco de infección.
Por lo anterior y ante la solicitud de los vecinos de la comunidad, la mañana de este miércoles arribó a la zona afectada el presidente municipal Moisés Ponce Méndez, junto con personal del ayuntamiento, y posteriormente se iniciaron los trabajos en fosas provisionalmente adaptadas para las descargas, bajo el compromiso de implementar acciones inmediatas para resolver la problemática originada por conflictos políticos y sociales con el representante ejidal de la comunidad vecina.
Así, trascendió que esta situación se deriva de diferencias entre el comisiariado ejidal y el gobierno local, que bloqueó las descargas argumentando que son directas a la barranca de su comunidad, sin embargo y ante el riesgo que representa el daño al colector para los vecinos de la colonia citada, el ayuntamiento presentó una denuncia penal en contra de quien resulte responsable.
Las autoridades municipales reconocieron que esta situación no se encontraba presupuestada, sin embargo se conseguirán recursos para reparar los daños y concretar la obra, inconclusa desde la administración anterior, para eliminar el foco de infección y sobre todo evitar daños mayores para los vecinos. “Se requiere de cerca de un millón de pesos y tendremos que agilizar los trabajos para evitar consecuencias mayores”, declaró el edil.
Asimismo trascendió por voz de los vecinos que incluso ya se ha registrado infección en los ojos (conjuntivitis) en una menor de edad, debido al mal olor que despide la fosa provisional, donde se concentran las descargas de aguas residuales de toda la colonia.