Pintado de verde y blanco, el taxi eléctrico se identifica claramente, distinto a los demás taxis. Dos de los 20 se encuentran en uso por el gobierno del Distrito Federal y esperan llegar a 100 antes de que termine la administración actual.
Estos primeros 20 vehículos eléctricos, de cero emisiones, fueron adquiridos por fideicomisos del centro histórico, con una inversión de 10 millones de pesos, y son de la marca Nissan Leaf. Son capaces de alcanzar una velocidad máxima de 145 kilómetros por hora y su batería tiene una duración de 6 a 8 horas o aproximadamente unos 200 kilómetros, lo cual es la distancia promedio que recorren los taxis diariamente en la ciudad capital. La estación para recargarlos, operada por General Electric, se encuentra en el centro histórico, a un lado de catedral. Es abastecida mediante el uso de celdas solares y puede atender hasta cuatro vehículos al mismo tiempo. Por ser diferentes estos taxis manejan una tarifa especial, más cara que la de los taxis tradicionales. El gobierno del Distrito Federal autorizó una tarifa inicial de $24.64 pesos y un saldo en el taxímetro cada 45 segundos por 250 metros de $1.65 pesos.
La ciudad de México es una de las pocas ciudades del mundo que ya está promoviendo activamente el uso de taxis eléctricos de cero emisiones.
En el estado de Aguascalientes existe un programa piloto de taxis ecológicos y seguramente otras ciudades seguirán el ejemplo del Distrito Federal. Ojalá tengamos la suerte de que Cuernavaca sea una de ellas…
La ciudad de Bogotá, en Colombia, está por hacer lo propio, entre otras de un grupo creciente de ciudades. Brasil y Chile también tienen programas pilotos actualmente. Esta iniciativa está siendo promovida por el C40 Cities: Climate Leadership Group (http://live.c40cities.org) en conjunto con la William J. Clinton Foundation (www.clintonfoundation.org) con el objetivo de mitigar las consecuencias del cambio climático, sobre todo en relación a la disminución de emisiones de carbono al medio ambiente. Además, la iniciativa promueve el uso de energía de manera más eficiente en las ciudades del mundo cuyo problema de contaminación es terrible: esas ciudades son responsables por más del 70 por ciento de las emisiones de carbono globalmente.
La tecnología para el desarrollo de los coches eléctricos no es nada nueva. Desde hace muchos años la posibilidad de lanzar al mercado un automóvil que no sea dependiente de los combustibles fósiles ha existido. Sin embargo, el poder de las empresas petroleras es tal que la tecnología fue controlada, incluso no permitida, lo cual contribuyó a la terrible contaminación de las emisiones tan tóxicas que hoy todos respiramos. En la actualidad, el impacto del cambio climático es tan agudo que por fin ha permitido la aparición y operación de estos vehículos eléctricos de cero emisiones. La tecnología es avanzada, limpia y menos ruidosa; no tiene nada en su contra. Al contrario, espero ver el día que nos prohíban los automóviles que usan gasolina a favor de los coches eléctricos. Ojalá que esto sea pronto. Imagina nunca tener que ir a cargar gasolina; imagina sólo enchufar tu coche en una estación de carga eléctrica. Los nuevos taxis eléctricos cuentan con una capacidad para 5 pasajeros y están hechos en un 90 por ciento de componentes reciclados y reciclables, contribuyendo así aún más a la sustentabilidad del medio ambiente.
Sólo veremos un cambio impactante en la calidad del aire el día que cambiemos nuestros vehículos por algún transporte eléctrico.
General Electric estima que si 10,000 automovilistas decidieran cambiar sus coches convencionales por el transporte eléctrico se dejarían de liberar a la atmósfera 33,000 toneladas métricas de emisiones contaminantes. Sin duda, éste es un número muy impresionante.
La era del coche eléctrico de cero emisiones está cada vez más cercana. La vemos vislumbrarse en la ciudad de México y ojalá que el resto del país siga el buen ejemplo.