El panorama resulta muy revelador porque una parte de ese porcentaje es analfabeta o con estudios mínimos, lo que hace pensar en la importancia de la educación como factor disuasivo de ciertas conductas antisociales.
No es el único factor para que hayan cometido delitos, pero sí parece ser común, así como la ingesta de drogas o alcohol.
Sólo un manejo multifactorial puede ayudar a reducir el porcentaje de jóvenes que delinque, y aunque sea costoso, vale la pena invertir más en el rubro, pues los resultados que se obtengan siempre serán benéficos.