Alguien parece asesorar mal a los dirigentes de los grupos que buscan crear cuatro nuevos municipios a partir de otras tantas comunidades indígenas.
De otra forma no se entiende la prisa por conseguir la declaratoria de elección de las nuevas alcaldías con el pretexto de asignarles presupuesto, cuando el procedimiento ya contempla dotarlos de una parte proporcional del presupuesto tomado del municipio al que hoy pertenecen.
Independientemente de que sea cuestionable que todos los habitantes de Xoxocotla, Coatetelco, Amilcingo y Hueyapan quieran la separación, el hecho de que los grupos dirigentes anuncien protestas si los diputados no conceden su reclamo en el tiempo que ellos marquen hace creer que se trata de maniobras malintencionadas para crear conflictos en la entidad.
Lo anterior se reafirma porque tanto el Poder Ejecutivo como el Legislativo han dado todas las facilidades para que nazcan los cuatro municipios. Difícilmente desde esos lugares se querrá enredar el asunto, pero lo cierto es que el conflicto es lo alguien alienta a partir de confusiones y malas asesorías.