Ayer se llevó a cabo la primera insaculación de ciudadanos convocados a fungir como funcionarios de casilla en la jornada electoral del primero de julio.
Todos los que resultaron electos serán convocados a capacitarse y del grupo que cumpla saldrán los que definitivamente ocupen ese lugar, mediante otro sorteo.
Los funcionarios de casilla juegan un papel clave en la elección, porque dan certeza al voto depositado en cada urna, de allí que recibir la capacitación sea clave para llevar a buen término el proceso o para evitar que se alargue el conteo definitivo.
Por ese motivo, no está de más exhortar a todos los ciudadanos que salieron elegidos a que cumplan con su deber y reciban las instrucciones necesarias.
Ojalá que sólo sean causas de fuerza mayor las que les impidan cumplir con su deber ciudadano, que a la vez es uno de los derechos más sagrados.