Un feminicidio se castiga con hasta 70 años de prisión, lo que en la práctica significa cadena perpetua.
Un homicidio puede alcanzar una condena mayor pero que en ningún caso representa que el criminal deba pasar el resto de su vida tras las rejas.
Por lo anterior, no es un asunto de matices sino de justicia la forma en que se califica la muerte violenta de una mujer.
De acuerdo a la información proporcionada en la nota respectiva, el año pasado no hubo en Morelos una sola sentencia por feminicidio, a pesar de que varias personas fueron imputadas por la muerte de mujeres.
Por lo anterior, la sociedad debería involucrarse para que los crímenes sean calificados de forma objetiva y no se utilicen subterfugios que sólo favorecen a quienes cometieron un delito deleznable que afecta a la parte mayoritaria de la población de Morelos.
