La migración ha sido siempre la salida al desempleo estructural que se padece en la entidad, por lo que la comprobación de que el endurecimiento de las medidas para frenar el flujo de mexicanos hacia Estados Unidos resulta preocupante.
Hay comunidades enteras de Morelos que literalmente se han trasladado al país vecino, aunque Tehuixtla, Tilzapotla y quizá Axochiapan son los casos más representativos.
Es obvio que el gobierno norteamericano tiene todo el derecho de hacer lo que considere conveniente en sus fronteras, pero muchos morelenses han encontrado allá su segunda casa y su principal fuente de ingresos para toda la familia.
Ya no se trata de noticias de lugares lejanos, sino una realidad que debemos enfrentar.