Los señalamientos de mal uso de los recursos públicos del fideicomiso "Unidos por Morelos" no sorprenden a nadie.
Los hallazgos contables acerca del gobierno anterior muestran el grado de corrupción e inmoralidad alcanzado por quienes tuvieron en sus manos el destino de Morelos.
Sin tentarse el corazón, esa gente aprovechó la peor tragedia que ha azotado la entidad para lucrar.
En su momento ese fideicomiso sirvió para que los entonces funcionarios se llenaran la boca con frases de ayuda y de aliento.
Es obvio que los crímenes que cometieron merecen un castigo ejemplar.