La Secretaría de Educación Pública anulo los resultados obtenidos por más de cinco mil profesores que participaron en un concurso a nivel nacional para optar a puestos directivos, debido a anomalías detectadas en la evaluación.
Específicamente se señaló que los exámenes cuestionados coinciden al cien por ciento en las respuestas correctas e incorrectas, una situación que las autoridades consideran está más allá de cualquier casualidad.
Lo anterior es grave porque implica una grave carencia de ética entre una parte de quienes dedican su vida a formar a los futuros ciudadanos.
Situaciones parecidas se han detectado en exámenes nacionales de otras profesiones, pero es la primera vez que ocurre en el gremio magisterial.
La primera reacción del sindicato ha sido defender a aquellos cuyos intereses resultaran afectados, pero no se sabe quién defenderá a la sociedad de semejantes conductas, más allá de la autoridad administrativa que ha actuado en consecuencia.