Los “tomacasetas” que hace poco más de dos años aterrorizaban a quienes transitaban por la autopista del Sol finalmente fueron absueltos de los mayores cargos que pesaban sobre ellos luego de que fueron detenidos cuando sus desmanes habituales habían subido de tono y ejercían la violencia descarada contra conductores de todo tipo de vehículos a los que exigen la entrega de dinero para que pudieran continuar su trayecto.
La intervención de las autoridades estatales puso fin a su carrera delictiva y los dejó un tiempo en prisión, el suficiente para que ahora les den por cumplida su condena.
Han salido libres pero ojalá que con la lección aprendida y no incurran de nuevo en las mismas conductas.
Firme quedó el antecedente de lo que puede hacer la autoridad.