Como ejemplo está la chiquillada, cuya tendencia es manejar la presidencia de la Mesa Directiva, porque para el siguiente año vienen los procesos preelectorales y la tesorería se convierte en una caja chica como lo ha sido para el presidente de la Comisión de Hacienda, Rabindranath Salazar Solorio, quien fue el que puso al tesorero.
Los partidos chicos al interior del Congreso local son los que se han dedicado más a obtener beneficios, sin haber logrado la confianza del voto ciudadano, solamente conseguir el porcentaje que les permita vivir del presupuesto.
En cuanto al resto de las bancadas como Acción Nacional, el tener la Junta Política le permite mantener negociaciones en plata y políticas, aunque haya sido uno de los principales perdedores de la contienda de julio pasado.
Los panistas extrañan la Legislatura pasada que les permitió varios manejos de recursos para las campañas de sus candidatos, quienes a pesar de haber perdido la contienda han logrado permanecer en la nómina oficial.
En cuanto a Grupo (o lo que queda) Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que en su mayoría no son priístas, la situación también está en buscar la manera de tener las mejores condiciones de manipular el presupuesto de la Cámara de Diputados local.
Tanto así que todos sus diputados están envueltos en el escándalo y enfrascados en la lucha por el poder y la dirigencia del Revolucionario Institucional, que al final evidencian que su arribo al Legislativo era para proteger negocios como los de diputados como Jorge Arizmendi, , Omar Guerra Melgar, Amado Orihuela, y Guadalupe Tovar, entre otros.
Y mientras el tiempo pasa, los acuerdos no llegan y el Congreso local se convierte en el negocio de los políticos, que su inexperiencia los ha llevado también a cometer errores graves que van en perjuicio de la sociedad.
Por lo pronto, valdría la pena que los diputados locales dejaran la declaracionitis fuera de lo cotidiano y empezarán a dar resultados, que son lo que urge sobre todo en materia de juicios adversariales u orales –que por lo pronto todavía en Morelos son considerados inconstitucionales y cientos de presos podrían quedar libres- dejar atrás los intereses de partido.
Por cierto, tras la muerte de dos custodios ayer, la reflexión obligada es sin duda la situación laboral que estos enfrentan.
¿Sabía usted que son obligados a trabajar 24 horas por 24, desde hace tres años, con el mismo salario?
Dos custodios ayer desgraciadamente fueron emboscados cuando conducían los Juzgados de Atlacholoaya a al defraudador, Mario Alberto Chávez Traconi, quien por cierto tenía el control del Penal de Jojutla. Los custodios, se dice, murieron por llevar al reo al Juzgado.
Mal pagados, explotados laboralmente, muchos de ellos tienen que aguantar y ahora hasta arriesgan su vida.
¿Qué han hecho por ello los diputados?. ¿No se dicen defensores de los derechos laborales?, pero eso sí, no olvidan cobrar sus dietas y salarios.
De otras cosas…
Ahora resulta que los patos se han vuelto cazadores y resultado de ello son las amenazas del ex asesor del ex presidente magistrado del Tribunal Superior de Justicia TSJ) Ricardo Rosas Pérez, Javier Pérez Carmona, quien se dice impoluto e insoluto, incorruptible y más Santo que el propio enmascarado de plata en su manejo al interior del Poder Judicial, plantea demandar a los magistrados por la forma en que lo corrieron.
Y sin embargo, los magistrados han iniciado una serie de acciones contra Pérez Carmona por tráfico de influencias, abuso de poder y lo que resulte responsable por actos que violan la Ley Orgánica, el Reglamento Interno y demás marco jurídico al interior del TSJ.