El conductor, al percatarse de la presencia policial, aceleró y la patrulla le cerró el paso. El sujeto detuvo la marcha pero comenzó a realizar llamadas telefónicas y a gritar amenazas contra los agentes.
Al revisar la camioneta –aparentemente blindada- la policía encontró una pistola, varias dosis de cristal, un radio de comunicación con frecuencias policiales y celulares, además de que el vehículo tenía reporte de robo.
Un elemento de la Policía Morelos tomó el teléfono celular de “El Barrios”, lo revisó por unos minutos y lo guardó en su chaleco. Es decir, no lo puso a disposición del Ministerio Público.
Seguramente por una buena cantidad de dinero, ese aparato móvil llegó a manos del jefe del grupo rival. Durante días lo estuvo analizando, hasta que decidió entregarlo a las autoridades.
Y lo hizo de una manera muy “sui géneris”: lo ató a una de las orillas de una lona que mandó colocar en las instalaciones de la Fiscalía General de Justicia recientemente inauguradas en Temixco. Otras dos fueron puestas –a plena luz del día- en el edificio del Ayuntamiento de Cuernavaca y en las instalaciones de la Policía Federal, hoy Guardia Nacional.
“… a la gente ya le quedó claro que la policía Morelos es una basura por Raúl Gómez Cruz, que está involucrado en homicidios, secuestros, así como todos sus mandos de Veracruz y el Grupo de Operaciones Especiales que los tienen como sicarios, ya les mandé evidencias a FGE, FGR, Gob Federal, Municipal y Estatal…” dice la lona impresa en letras negras y rojas sobre una lona (ya tiene su plotter, eso es evidente).
Al parecer, la información contenida en ese teléfono ya fue enviada también a medios nacionales. Un noticiario que sólo se transmite en la Ciudad de México por canal 6 de televisión abierta y 235 de Sky, se refirió a la detención de “El Barrios” y refirió que en su teléfono celular tenía fotos y videos de sus víctimas.
Y efectivamente, la televisora reproduce fotos de Paul Vizcarra, donde aparece todavía vivo pero con huellas de tortura, rodeado de quienes se supone son sus captores. El reportero que hizo la nota menciona que esas fotos le fueron enviadas a sus familiares del secuestrado para obligarlos a pagar el rescate, sin embargo, hasta donde pudimos indagar con la familia, nunca hubo una petición de rescate.
Luego aparece un video donde se escucha una voz masculina que dice “hermanito, hermanito, aquí estamos poniendo campana a este perro”, y se observa la avenida Teopanzolco. Luego otro video donde se nota que ya es de noche, y se escucha otra voz que dice “estoy aquí, ya dimos varias vueltas pero no llega el vato carnal”.
La voz en Off del reportero señala: “Así informaban los sicarios a su jefe, Abel Maya, que esperaban a otra de sus víctimas, Juan David Juárez, el ex secretario de Seguridad Pública de Cuernavaca, ejecutado el 5 de diciembre al llegar a su casa en la zona habitacional de Tepocazalco (sic)”.
Hasta ahora es lo único que se ha publicado en medios formales, pero en internet existe una página que se llama “operacionesespecialesmexico.com” en la que se publicó que “las imágenes, videos y audios hallados en el celular que portaba un presunto sicario detenido, quien dijo pertenecer a la banda delictiva “Los Maya”, podría ser la clave para esclarecer diversos crímenes entre los límites de la Ciudad de México y Cuernavaca. Entre ellos, el del activista y protector ecológico Paul Vizcarra, quién fue encontrado muerto en la alcaldía Tlalpan, en octubre de 2019”.
Un detalle interesante es que en esta publicación viene una “captura de pantalla” de lo que parece ser la Plataforma México (que no es pública) con la ficha personal de Raúl Gómez Cruz, en la que se menciona que nació el 6 de abril de 1974 en Veracruz, que es soltero y que tiene una licenciatura completa en el Centro Universitario Coatzacoalcos.
Esa captura de pantalla se supone que iba en el teléfono de “El Barrios”.
El teléfono se supone que ya debe estar en manos de la Fiscalía General del Estado (si no es que alguien lo tomó antes de que se iniciara la cadena de custodia), y en estos momentos debe estar siendo analizado minuciosamente por los técnicos en Telemática.
Si existe la voluntad política y la capacidad de hacerlo, con esa información se puede llegar al fondo de las investigaciones en torno no sólo a los ya mencionados Paul Vizcarra y David Juárez, sino de otros.
Fuentes bien informadas refieren que en el teléfono del sicario también vienen conversaciones que permiten conocer el móvil de los homicidios de Jesús García y Roberto Castrejón, ambos dirigentes de comerciantes adheridos a la central obrera de la CTM, en mayo del año pasado.
Y no, el hecho de que la doble ejecución se haya realizado a plena luz del día y a un costado del Palacio de Gobierno, no fue un mensaje de la delincuencia organizada, sino más bien porque los sicarios llegaron a la conclusión (después de semanas de andarlos vigilando) que ese era el único momento en que podrían cumplir con la encomienda.
Es decir, al sicario no le quedó otra que hacerlo en medio de los reporteros, fotógrafos y camarógrafos, pues había recibido un ultimátum para que lo hiciera o pagaría con su vida.
En los audios se escucha la frase “hay que quitarlo de en medio” refiriéndose a Jesús García, quien no solamente representaba un riesgo para las demás organizaciones sindicales, sino también andaba realizando investigaciones por su cuenta para descubrir al asesino de su hijo Manuel García Bejarano.
Veremos hasta dónde llegan las investigaciones con el uso de la información que contiene el teléfono celular al que hacemos referencia, pero sabemos de buena fuente que varios servidores públicos andan muy nerviosos.
HASTA MAÑANA.