Todavía el lunes por la tarde-noche magistrados del Tribunal Superior de Justicia cabildeaban la posibilidad de lograr una elección que pudiera dar muestras de unidad y terminar con el empate de nueve contra nueve que había venido prevaleciendo al interior del Pleno, pero después de las nueve de la noche, la presidenta Carmen Cuevas dio la orden: “vamos con Rubén, con los votos que tenemos”, y lanzó la convocatoria para el día siguiente a las nueve de la mañana.
Así, a las 9:40 del martes cinco de mayo se cumplía el protocolo de la votación y el magistrado Rubén Jasso Díaz protestaba formalmente como presidente del TSJ de Morelos, en una inusual ceremonia ante un auditorio vacío y con el rostro cubierto con un cubrebocas.
“Nos dieron madruguete, pero no vamos a convalidar esa elección que es la continuidad de Carmen Cuevas”, me confió un magistrado del grupo “disidente” el lunes por la noche. Y efectivamente, no se presentaron a la sesión que tenía como único punto la elección del presidente para el periodo 2020-2022.
Y es que el grupo de los disidentes se fracturó. No fue bien visto que uno de sus miembros, Carlos Iván Arenas Ángeles, comenzara una campaña que incluyó reuniones con grupos sociales y conferencias de prensa, haciendo declaraciones “como si ya fuera el presidente”. El jueves 30 Carlos Iván anunció que retiraba su candidatura.
Surgió entonces la posibilidad de que quien encabezara a los disidentes fuera la magistrada Rocío Bahena Ortíz, con una larga trayectoria dentro del Poder Judicial. Pero no logró convencer a ninguno de los magistrados leales a la todavía presidenta.
En ese grupo, Carmen Cuevas alentó las aspiraciones de sus compañeros de grupo Manuel Díaz Carvajal, Elda Flores León y Rubén Jasso Díaz, pero ninguno de ellos logró la simpatía de la disidencia. Un solo voto hubiera sido suficiente para romper el empate.
Así llegaron a la hora fijada para elegir a quien sustituiría a la polémica presidenta Carmen Cuevas. Puntuales: Elda Flores León, José Valentín González García, María Idalia Franco Zavaleta, María del Carmen Aquino Celis, Manuel Díaz Carbajal, Miguel Ángel Falcón Vega, Rubén Jasso Díaz, María Leticia Taboada Salgado y María del Carmen Verónica Cuevas López.
Tras verificar que había nueve de los 18 magistrados que conforman el Pleno, la magistrada Cuevas hizo notar que “de acuerdo a lo establecido en los artículos 18 y 20 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que si bien es cierto que el ordenamiento prevé que para ello se requiere las dos terceras partes, también lo es que el único impedimento que establece para la continuación de esta audiencia, es que alguno de los magistrados no estuviera debidamente notificado y que en el caso no es así ya que se notificaron oportunamente, en tal virtud no existe impedimento para la celebración de esta sesión”.
Rubén Jasso secundó a la magistrada presidenta, recordando que en la sesión del 14 de mayo del 2014, también había solamente 9 magistrados, mismos que votaron a favor de llevar a cabo la sesión en la que fue reelecta la presidenta Nadia Luz María Lara Chávez. “También estuvieron los magistrados Rocío Bahena Ortiz, Ángel Garduño González y Jorge Luis Gamboa, y bajo ese criterio que ellos adoptaron en esa ocasión, creo que estaríamos en condiciones de continuar con esta sesión”, acotó.
- Considero presidenta que con los antecedentes a los que usted ha dado lectura nos encontramos en condiciones perfectas para poder continuar con esta diligencia- secundó.
-Yo estuve en esa sesión de pleno solemne del 2014 y voté a favor de continuar con 9 asistentes, así que hoy por congruencia voto en el mismo sentido-, ofreció Valentín González.
-El personal del magistrado Carlos Iván Arenas y del magistrado Juan Emilio Elizalde Figueroa trajo sus togas a los lugares de cada uno de ellos, lo que implica que tenían conocimiento y que iban a venir a la sesión de pleno porque sus togas están aquí en este momento- apuntó la magistrada Elda Flores León.
-Considero que ya es momento de sentar un precedente para imponer sanciones a los magistrados por no venir a las sesiones- sugirió la magistrada Leticia Taboada.
El magistrado Miguel Ángel Falcón Vega permaneció callado toda la sesión. Quizás recordando aquellas imágenes cuando enfurecido se levantó de su asiento, sentó de un empujón al magistrado Valentín González y caminó hasta el lugar donde estaba sentado el magistrado Jasso y le propinó un derechazo que afortunadamente no atinó.
Manuel Díaz Carvajal tampoco habló. Durante mucho tiempo circuló la versión de que él era el idóneo para sustituir a Carmen Cuevas pues había sustentado legalmente muchos de los documentos que la presidenta presentó como suyos. Pero al final tuvo que disciplinarse.
Tanto Falcón Vega como Díaz Carvajal votaron por Rubén Jasso para que pudiera asentarse que fue electo “por unanimidad de los magistrados presentes”. Sin embargo, en los hechos tiene a la mitad de los magistrados en contra.
Rubén Jasso Díaz tendrá que ser muy hábil para sortear las vicisitudes que implican ocupar la titularidad del Poder Judicial. Afortunadamente la relación personal con los magistrados disidentes es cordial y poco a poco puede ir logrando su apoyo para que el TSJ no se vea como un poder dividido y conflictuado.
Lo más difícil será quitarse el estigma de que fue “el candidato de la presidenta”, y que por lo tanto le debe sumisión. Algunos medios de comunicación le pusieron el mote de “graquista” pero eso es porque no le encontraron algo negativo y con eso tratan de desacreditarlo.
Rubén es miembro de una familia de abogados. Su padre, Felipe Jasso Escobar, fue presidente de la Barra de Abogados, en tanto que su hermano Martín es magistrado del Tribunal de Justicia Administrativa.
Es egresado de la Facultad de Derecho de la UAEM, generación 1990-1995; maestro en Procuración y Administración de Justicia por esa misma casa de estudios y doctor en Derecho por el extinto CIDHEM.
Conoce perfectamente el Tribunal Superior de Justicia, no solamente porque fue juez menor y de primera instancia antes de ser magistrado, sino porque representó a los magistrados en el extinto Consejo de la Judicatura, órgano que se encargaba de todas las cuestiones administrativas.
Como verán, la preparación académica y la trayectoria la tiene, solamente falta ver qué tan hábil es en el manejo político.
HASTA MAÑANA.