El Código Penal del estado de Morelos dice que “cometen el delito de coalición de servidores públicos, los que teniendo tal carácter se coaliguen para tomar medidas contrarias a una ley, reglamento u otras disposiciones de carácter general, impedir su ejecución o para hacer dimisión de sus puestos con el fin de impedir o suspender la administración pública en cualquiera de sus ramas”.
Y el diccionario define a la coalición como “una alianza que se crea a partir del vínculo que establecen sus integrantes. Dicho acuerdo surge con la intención de desarrollar algún tipo de acción en conjunto”.
Pues bien, la Fiscalía Especializada en el Combate a la Corrupción (FECC) que encabeza Edgar Núñez Urquiza, considera que Carlos Andrés Montes Tello (encargado de Despacho de la Fiscalía General de Justicia del Estado por ausencia del titular Uriel Carmona Gándara), Homero Fuentes Ayala e Isaías Rodríguez Moreno “se coaligaron” para realizar “el asalto a la Fiscalía Anticorrupción” del pasado 14 de septiembre con la finalidad de asistir a la audiencia en la que Uriel Carmona Gándara sería imputado por el delito de Tortura, y ejercer el desistimiento de la acción penal.
Sin embargo, en nuestra opinión también hay una coalición para poner tras las rejas a los servidores públicos antes mencionados, y ese acuerdo involucra al Poder Judicial del Estado.
Homero Fuentes Ayala, Coordinador General de Administración de la Fiscalía General de Morelos, fue detenido la mañana del pasado martes por ejercicio abusivo de funciones, delitos cometidos por servidores públicos y coalición. El miércoles por la noche quedó —como si fuera una consigna— sujeto a prisión preventiva “justificada” y seguramente seguirá preso en el Penal de Atlacholoaya.
El “operador financiero del fiscal”, fue bajado de su vehículo por elementos de la Comisión Estatal de Seguridad Pública a unos metros de las instalaciones de la Unidad Especializada en Secuestro y Extorsión. Fue una especie de “levantón” con la peculiaridad de que quienes se lo llevaron iban con el uniforme de la CES a bordo de por lo menos cinco patrullas.
Recordemos que, desde el 14 de septiembre existen dos Fiscalías Anticorrupción en Morelos y ambas aseguran ser la única y auténtica. La primera, que encabeza Isaías Rodríguez y que estuvo una semana ocupando las instalaciones de Lomas de la Selva, mientras que la otra, con Edgar Núñez Urquiza al frente, era una “Fiscalía en el exilio” que se movía de Juzgado en Juzgado, hasta que consiguió la suspensión provisional del acto reclamado y entonces los papeles se invirtieron.
No olvidemos aquel “show” protagonizado por el fiscal antisecuestros queriendo entrar a buscar unas supuestas “mujeres secuestradas” acompañado por una docena de elementos ministeriales mientras Urquiza era resguardado por decenas de militares.
Ahora es Isaías Rodríguez quien no tiene sede, y se mueve entre la oficina de la Fiscalía General y el Congreso local, donde un grupo de 15 diputados lo protege incondicionalmente a él, al encargado de despacho, Carlos Andrés Montes Tello, y al fiscal Uriel Carmona Gándara. Bueno, eso era hasta hace unos días, porque actualmente se encuentra “no localizable”.
Para ese grupo, quien está actuando ilegalmente es Núñez Urquiza, puesto que fue destituido por Isaías Rodríguez desde el 19 de septiembre y en la audiencia incidental efectuada el 9 de octubre, Martha Eugenia Magaña López, Jueza Quinto de Distrito en el Estado de Morelos, determinó como improcedente conceder la suspensión solicitada por Edgar.
“El 19 de septiembre de 2023, (Rodríguez Moreno) remitió el oficio en el que declaró el cese inmediato de efectos del nombramiento de Edgar Rodolfo Núñez Urquiza quien desempeñaba el cargo de Vicefiscal Anticorrupción adjunto a la citada fiscalía (...) el cargo que ejercía el peticionario es de extrema confianza, por lo que no se trató de una remoción, cese o separación sino de una nueva designación por ejercicio de facultades en la designación de cargos de confianza que la ley le atribuye”, indica el Amparo de la Audiencia Incidental 1291/2023.
Núñez Urquiza ha pretendido justificar su proceder con base en una suspensión que le concedió el Tribunal de Justicia Administrativa, que pertenece al Poder Judicial del Estado de Morelos. Pero más que esa protección legal, el verdadero apoyo a Urquiza es notorio por los elementos que tiene la FECC todos los días a su disposición, tanto de Policía Preventiva Estatal, como de Guardia Nacional e incluso de la Secretaría de Marina.
Esos elementos podrían estar realizando labores de prevención del delito. De igual manera, el personal de la FECC podría estar integrando expedientes de ciudadanos normales en contra de servidores públicos, pero no: todos están al pendiente de los amparos de “la otra Fiscalía” para detenerlos en cuanto dejen de tener efectos.
Por eso detuvieron a Homero, porque no estuvo al pendiente de las fechas del amparo que promovió, y se confió por el regreso de su jefe Uriel Carmona.
Pero además, la detención de Homero Fuentes resulta fundamental en el pleito que mantienen “las dos fiscalías”, pues fue precisamente él quien firmó los documentos mediante los cuales se dio de baja a 13 funcionarios de la FECC, quienes realizaron una inusual conferencia de prensa que fue encabezada por el propio titular de la dependencia.
A la fecha, a Núñez Urquiza, María Elena Luengas Páez, Ignacio Zeus Gutiérrez Córdova, Zaira Labra Delgado, Miriam Lariza Rodríguez Galindez, Reynaldo Silva Trejo, Carlos César Antonio Díaz Ramírez, Carlos Rodríguez Pérez, Joan Bryan Zulbaran Vergara y Brayan Sedano Solís Sedano, les fue negada la suspensión definitiva en los amparos que promovieron, o al menos eso es lo que dice la página del Poder Judicial Federal.
En tanto que la audiencia incidental de los también excolaboradores Nadia Karina Figueroa Castro, José Martín Sánchez Ortiz y Berenice Álvarez García está pendiente de celebrarse.
Así las cosas, tal pareciera que hubo un acuerdo para darle todo el apoyo a Urquiza a cambio de que ponga a disposición de un juez penal a determinados personajes, aunque esa misión conlleve el riesgo de quedar en determinado momento como responsable de algún delito de los que él actualmente les está imputando.
Los refranes mexicanos tienen un algo grado de veracidad: “Los carniceros de hoy serán las reses de mañana”.
HASTA EL LUNES.