En esa exigencia de justicia del gremio organizado, al que las autoridades de nuestro país ni siquiera toman en cuenta, resulta de gran aliento esta muestras de apoyo internacionales, cuando menos para provocar algo de vergüenza a las autoridades que se suponen responsables para atender estos brutales crímenes contra las libertades de prensa y expresión.
Este es el “Comunicado de la FELAP ante el asesinato de otro periodista en México.
La brutal violencia que envuelve a México volvió a atacar a los periodistas, esta vez en la persona de René Orta Salgado, asesinado en el estado de Morelos, donde, asegura el colega Teodoro Rentería -fundador y presidente vitalicio de la FAPERMEX y vicepresidente de la FELAP por México- no se producía un hecho similar desde hace 12 años.
Morelos, amplía Teodoro Rentería Arróyave: "es el escenario del asesinato que comprueba nuestro acierto de que el gremio mexicano vive en un inmisericorde y permanente duelo".
La Federación Latinoamericana de Periodistas (FELAP) en contacto con nuestra afiliada FAPERMEX reitera el llamado a respetar los derechos humanos, en conciencia de que las más altas responsabilidades políticas y judiciales del país no han dado respuesta al desesperado ¡ya basta! repetido insistentemente por el gremio organizado.
Con estupor vemos que la impunidad sistemática abre camino diariamente a nuevos crímenes, en una espiral de barbarie interminable, que condenamos.
¡Seguridad! para todas y todos, trabajadoras y trabajadores de la prensa!
¡Paz y justicia en México!
A los familiares, compañeras y compañeros del periodista asesinado, nuestras condolencias.
A las compañeras y compañeros de la FAPERMEX y el club Primera Plana, nuestra solidaridad.
Por el Comité Ejecutivo de la FELAP.
Juan Carlos Camaño, presidente.
La pregunta queda en el aire ¿Habrá alguna respuesta de mínima dignidad de las autoridades mexicanas para revertir estos crímenes contra las libertades de prensa y expresión?
Al aire
Recibimos la llamada de parte de un colega sobre su molestia de que en el comunicado solidario de la FELAP se hablaba de un automóvil de lujo, en el caso del compañero Orta Salgado; no comprendimos el fondo de la incomodidad.
Lo que si expresamos es que la importancia radica en el apoyo, en la molestia y en la exigencia para que el crimen se esclarezca; estamos lejos de protagonismos y debates infructuosos, mucho menos a costa del dolor de los familiares y del compañero caído.