Con una gran carga de responsabilidades en sus espaldas, asumiéndolas todas con vigor y gallardía, el ALM tuvo su fiesta. Ya no son aquellas que disfrutábamos con la misa desde primera hora oficiada por el padre José Espín Velazco, párroco de Tepetates, con las carreras de encostalados, los torneos relámpago en la Estación entre secciones, los comelitones por áreas (por ejemplo en la sucursal del mítico Pancho’s Pleace donde los anfitriones eran el generoso y emblemático regidor don Agustín Pedraza Avalos y el padrino del que escribe, don Emilio Beltrán Ayala, ambos seguramente echándose unas allá donde reposan tras una vida plena) y la consumación con orquestas, grupos de rock, tropicales y demás en cada uno de los polos del gran mercado. Tremendas pachangas. Eran los días que organizaban don Lucas Inesa, don David Gutiérrez, don Olegario (que sigue por fortuna en su tienda, atendiendo a sus clientes), don Raúl Vertiz y sus enjundiosos hijos Enrique y Marcelino.

Hablamos de uno, dos y hasta cinco años después de abierto “El Coloso de Los Sabinos”, así se conocía a la loma donde se construyó esta magna obra. Luego vendrían buenos tiempos también con don Heriberto Reyes Lara, Guillermo León Flores, el doctor Alfredo Méndez Rodríguez y Chucho Gallardo. Lo más reciente todos lo conocen. El ALM ha vivido eventos difíciles, donde ha quedado demostrada su amplia capacidad de reacción y solidaridad de esa gran familia. El último, trágico y dramático, el incendio del año pasado que, poco a poco, da paso a un nuevo rostro del ALM y la regeneración y fortalecimiento de su base como es la gran cúpula que repara el ingeniero Sandoval. Bien pues.

Era común que en los años iniciales llegaran los altos funcionarios a compartir el gusto y los disgustos con los comerciantes, luego se esfumaron, lo borraron de su agenda. Ayer estuvo muy temprano el presidente municipal Manuel Martínez Garrigós, un buen rato, comió atole y tamales, habló con todos y reconfirmó que ha hecho por el mercado lo que marca su obligación y puede dar más. Su presencia fue bien recibida en tiempos que otros prefieren esquivar. Fiel a su estilo Martínez Garrigós y, encima de ello, sabedor que para su objetivo siguiente tiene que estar con todos y a todos atender.

Lo importante es que ya cerca del medio siglo, el mercado “Adolfo López Mateos” vive con sus contrastes de siempre, pero goza de buena salud. Para los que durante mucho tiempo apuestan a “quitarlo de ahí”, les decimos que es más fácil remover un dirigente, un presidente municipal y un gobernador, que esa gran mole que tiene su peso fundamental en miles de familias que componen un conglomerado de casi 50 mil morelenses productivos. Así que ya lo saben y que vengan más años y mucho trabajo.

El Empuje de los Jóvenes

Mañana es nombrada coordinadora de Estrategia para los Jóvenes del Sector Popular, Ana Karen Manrique, durante un evento celebrado en Jiutepec. Ana Karen es de los tantos cuadros juveniles que empujan fuerte en el PRI de Morelos. Su tarea será generar estructuras y consolidar las ya existentes en cada rincón del estado para el sector que encabeza el vertebrado político Víctor Samuel Palma César.

En tanto, Jonathan Márquez se enfila como el siguiente dirigente de la juventud del PRI. Los jóvenes vienen pisando fuerte. Hay casos específicos como el gobernador de Quintana Roo Roberto Borge de 31 años, de Javier Duarte de Veracruz que cuenta 38 o de los alcaldes de Guadalajara y Cuernavaca, Aristóteles Sandoval y Manuel Martínez Garrigós de 33 años, que encabezan preferencias en sus estados Jalisco y Morelos que tienen elección concurrente con la federal el primer domingo de julio próximo.

Márquez, es un joven preparado, que se vertebra desde la infancia en el PRI, listo para tomar la batuta de un sector predominante en los comicios venideros, donde de acuerdo a mediciones profesionales, los jóvenes de 18 a 30 años serán decisivos para inclinar de un lado u otro la balanza.

Es importante subrayar que fue Jonathan Márquez, quien en su momento interpuso la denuncia ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la federación para que se renovara la anterior dirigencia nacional juvenil, y el fallo le fue favorable. Eso marcó un referente histórico para su partido y a él correspondió accionarlo, cuidarlo jurídicamente y operarlo ya determinado. Indica lo anterior que en tanto su partido en Morelos era presa de la rapiña y el oportunismo, este joven de Temixco hacía política en la ciudad de México con sus pares priistas, que le tienen respeto y reconocimiento. O sea que tiene con qué.

La renovación del Frente Juvenil Revolucionario de Morelos es además de necesaria, obligada por las condiciones. En el comité estatal de este partido saben que en tanto renueven esta dirigencia sus expectativas crecen en el terreno electoral. Y todo indica que Márquez es el que reúne los ingredientes que el sector juvenil tricolor requiere. Es tiempo de los jóvenes.