Desde enero hasta ayer, Morelos contribuyó a la estadística nacional con más de 300 ejecuciones ligadas al el crimen organizado. Para una entidad con la densidad demográfica y extensión territorial de la nuestra, lo anterior no es nada envidiable y revela una grave descomposición en el tejido social, así como la incapacidad de las corporaciones policiacas federales, estatales y municipales en el combate a la delincuencia organizada y común.
En mayo del presente año, la firma Santiago Roel y Asociados presentó los resultados del SDN correspondiente a 2009. Ahí se observaba que la tendencia al alza ya era perceptible. Ese reporte sobre la conducta delictiva es uno de los más actualizados, puesto que el difundido por el Instituto Ciudadano Sobre la Inseguridad (ICESI) en noviembre de 2009, incluía los datos del año previo.
El SDN mide la cantidad de delitos cometidos por cada 100 mil habitantes, lo que permite conocer cuáles son los estados más violentos, independientemente de sus características y población, pero evita dar cifras totales. Para la medición, el Semáforo estableció una media nacional, al calcular los delitos de 2007 y 2008, fecha esta última en la que el índice se disparó.
Según el semáforo delincuencial, las entidades con más indicadores que registraron el doble o más de la media nacional durante 2009 fueron: Baja California, Morelos y el Distrito Federal. Sin duplicarla, pero por encima de la media, estuvieron Aguascalientes, Chihuahua, Quintana Roo, Baja California Sur, Coahuila, Estado de México, Michoacán, San Luis Potosí, Tabasco y Tamaulipas.
Entre los estados donde la violencia se exacerbó se menciona a Baja California, Morelos y el Distrito Federal; en tanto que las entidades con indicadores por encima de la media fueron Chihuahua, Distrito Federal, Michoacán, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Tamaulipas, Aguascalientes, Baja California Sur, Durango, Guerrero, Guanajuato, Hidalgo, Estado de México, San Luis Potosí y Yucatán. Sergio Villarreal Barragán (“El Grande”), en declaraciones vertidas ante agentes ministeriales federales, ha reconocido que en Morelos asesinó a casi dos centenas de adversarios del cártel Beltrán Leyva (aunque la cifra de ejecuciones fue mucho mayor entre todas las bandas involucradas).
En la lista de entidades con más del doble de la media en el rubro de delitos patrimoniales destacaron Baja California, Aguascalientes, Coahuila, Distrito Federal, Morelos y Nuevo León, seguidos por Baja California Sur, Chihuahua, Estado de México, Quintana Roo y San Luis Potosí. Si bien es cierto que los tres niveles de gobierno han reducido el narcomenudeo, también es verdad que el robo está incontenible en nuestra entidad.
Chihuahua, Durango, Sinaloa y Guerrero registraron más del doble de homicidios que la media; y aun cuando no llegaron al doble, pero sí estuvieron muy por encima de la media nacional -14 homicidios por cada 100 mil habitantes-, el SDN incluyó a Baja California, Oaxaca, Sonora, Morelos, Michoacán y Nayarit.
En extorsiones, delito que se incrementó en 18 entidades durante 2009, Morelos ocupó el primer lugar, con un índice cinco veces mayor que la media nacional (7.4 casos por cada 100 mil habitantes). Le siguieron: Oaxaca, Baja California Sur, Baja California, Tabasco, San Luis Potosí, Distrito Federal, Jalisco, Michoacán y Quintana Roo, todos por encima de la media.
Y en el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, conmemorado ayer, la Organización Mundial de la Salud reconoció que en todo el mundo, una de cada cinco mujeres ha tenido relaciones sexuales contra su voluntad, mientras en Morelos, durante lo que va de 2010, se han registrado 384 denuncias de mujeres víctimas de delitos sexuales, de las cuales 93 corresponden a violación contra niñas menores de 16 años. Esto es sumamente grave.
La coordinadora de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en México, Capítulo Morelos, Andrea Acevedo, informó que durante los pasados 10 meses se denunciaron 2 mil 766 hechos relacionados con mujeres violentadas, y de esa cifra 384 fueron delitos sexuales. La cantidad de violaciones rebasó los 290 casos. En tal contexto de abusos, Acevedo calificó tales cifras como alarmantes, sobre todo porque se está hablando de niñas ultrajadas, menores de 16 años.
¿Y el tráfico de influencias en la zona sur, donde funcionarios ministeriales pretenden favorecer a Víctor Tapia Garnica, hermano del alcalde de Tetecala, Víctor Tapia Ocampo, acusado de violación? ¡Bien, gracias!
