“El amar a tu prójimo como a ti mismo se ha vuelto mucho más potente”.
John Authers.
Es inevitable estar reflexionando sobre el futuro de la humanidad en estos tiempos. Y también es inevitable darse cuenta de que para entender lo que nos está pasando, y lo que nos pasará, se requerirá de una cultura vasta. Necesitamos nociones de epidemiología para apreciar el esfuerzo de los especialistas para comprender cómo se propaga el coronavirus Sars-Cov-2, y saber quiénes somos los más susceptibles a la enfermedad resultante, el Covid-19. La biología molecular nos permite entender cómo funcionan los códigos genéticos: el del virus para causar enfermedad y el de los humanos para ser más o menos susceptibles. La fisiología humana nos ilustra el porqué de los síntomas, y las bases del funcionamiento del sistema inmune. Y para entender la progresión de las infecciones virales se requiere saber lo que es una curva exponencial.
Y esto es sólo la parte científica. También tenemos que pensar cómo nos sentimos en estos momentos de confinación y qué acciones vamos a tomar después, tanto en lo individual como en lo colectivo. A este respecto, John Authers, especialista en mercados financieros, quien escribe para la empresa Bloomberg, después de haberlo hecho para el Financial Times, acaba de escribir el artículo intitulado: “Cómo el coronavirus está sacudiendo el universo de la moral” (“How coronavirus is shaking up the moral universe”, Bloomberg Opinion, 29 de marzo de 2020 [1]).
Authers nos presenta una guía de cuatro formas de ver el mundo que están siendo puestas a prueba por el Covid-19. La primera es una ideología denominada Rawlsiana, establecida hace cincuenta años por John Rawls, filósofo de Harvard. De acuerdo a ella, las decisiones se basan en tratar a los demás como a nosotros nos gustaría ser tratados. Esencialmente implica preocuparse por los más vulnerables, a tono con algunos preceptos religiosos, aunque Rawls no era religioso.
La segunda, el Utilitarismo, asociada al filósofo del siglo XIX John Stuart Mill, que propone “el mayor beneficio para el mayor número”, lo cual implica que algunas personas son sacrificadas por el bien de la mayoría. Es así que las políticas públicas establecen un precio sobre la vida humana para calcular el costo-beneficio de las medidas adoptadas. Si el confinamiento dura mucho tiempo, esta ideología podría adquirir fuerza.
Authers prosigue presentando la tercera forma de ver al mundo, la de los Libertarios, en donde el ser humano tiene el derecho a vivir para sí mismo y su felicidad individual no depende de otros. Dicho pensamiento se puede trazar hasta John Locke, filósofo de la Ilustración y a los líderes políticos que firmaron la Declaración de la Independencia de los EUA. En este sentido, la respuesta hacia el Covid-19 en Occidente ha incrementado los poderes del Estado y limitado los derechos individuales, lo cual va en contra de esta ideología. Sin embargo, por otro lado, la reciente epidemia de sarampión en los EUA fue el resultado de que algunos padres de familia se rehusaron a vacunar a sus hijos, en una reacción libertaria que afectó al bien común. Las compras de pánico, el acaparamiento de productos y el exigir que los parques permanezcan abiertos forman parte también de esta ideología.
La cuarta ideología es la de los Comunitarios, en donde los derechos del individuo cuentan, pero no más que los de la comunidad. Esta postura filosófica se remonta a los griegos y está representada en tiempos modernos por el filósofo Michael Sandel, quien basa la justicia en el bien común, enfatizando los sacrificios que hacemos por los demás. Sin embargo, esta ideología podría constituir la base de alguna postura conservadora, en donde el resto de la sociedad no debe sacrificarse por los adultos mayores, los más susceptibles al Covid-19. En contraste, en China y en otros países asiáticos esta ideología Comunitaria se refleja en la gran disciplina social mostrada para combatir la pandemia de Covid-19, en una justificada obediencia a un Estado jerárquico y autoritario pero benevolente.
Finalmente, Authers opina que la reacción occidental a la pandemia ha sido Rawlsiana, en donde los políticos asumen que su deber es el de proteger a todos como ellos desearían ser protegidos, y en donde las personas están decidiendo auto-aislarse por el bien de los demás. Authers considera que esta es la ideología que prevalecerá a través del tiempo.
Las reflexiones de John Authers son de gran relevancia para comprender y moldear nuestras reacciones ante esta pandemia. Sería deseable tomar acciones para proteger la salud física, mental y económica del individuo y de sociedades enteras, y que a la vez se tome en consideración la salud de nuestro planeta y de todas las demás especies de animales y de plantas que lo habitan. Y, efectivamente, para ello, también requerimos saber de filosofía.