Está claro que hay un primer piso donde disputan la nominación a gobernador los mejor posicionados, y todos los conocen: son Manuel Martínez Garrigós y Amado Orihuela Trejo, en ese orden según los conocedores de las entrañas nacionales y locales del tricolor. Un segundo piso no está claro porque quien no tenga la nominación, desde la primera posición al Senado de la República, lleva “mano” en Cuernavaca, las cuatro diputaciones y la federal. Hay un tercer piso que contiene la segunda posición al Senado y que involucra a las demás mencionadas.
¿Por qué hay tantos que dicen que buscan solamente la gubernatura? Es necesario que lo hagan, así se estila en el quehacer político. Enfilados a la realidad, bien vale enlistar a los que pueden ser candidatos a la segunda posición del Senado, las diputaciones federales, las locales y la actual “joya de la corona” que es Cuernavaca. No es de quien quisiera, sino de los que tienen la posibilidad real y usan como pretensión original ello pero “le tiran al 15 para meter el 14… o el diez”.
Hay políticos hechos, serios, incluso honorables como Víctor Samuel Palma César que sería un extraordinario candidato a la presidencia. Ha consolidado su derecho de piso hace tres años, pero oficial e institucionalmente lo inició en el 2000 al frente de un PRI derrotado, desgarrado, endeudado. Pero también los hay que no obstante la ausencia por tareas nacionales de su partido, muestran la prudencia que dan los años de ejercicio y con todo derecho buscan la candidatura de su ciudad, como es el caso de Jorge Meade Ocaranza. Incluso, con menores méritos, afanoso siempre, las velas prendidas más en lo que por él puedan hacer en Las Grandes Ligas que en consolidar presencia social aquí, el diputado federal Francisco Moreno Merino debe ubicarse en la realidad que todos ven, que él conoce pero desvía el reflector: puede ser nominado en Cuernavaca si supera en trabajo y talento a los otros, pero por talacha y méritos podría jugar un distrito local sin problema. Debemos tener presente que el actual cargo de Paco es el primero de elección popular que tiene en su vida, y cede ventaja ante cualquier otro, incluido el secretario general del Ayuntamiento Víctor Manuel Saucedo Perdomo, con el estilo de siempre que no a todos gusta, pero al que tiene que valorársele que ha metido orden hacia las entrañas del aparato municipal, por una razón sencilla: le sabe.
Otros lo desean intensamente; son diputados locales que bien la jugaron pero no con la seguridad de ganar. Hoy como que las condiciones los hacen candidatos naturales, pero hay tamaños, niveles, y debe respetarse a la política. Se menciona continuamente a Fernando Martínez Cué, un empresario carismático que nunca pudo dar el estirón político, que jamás entendió que esta actividad, celosa por naturaleza, cuando trata de manejarse empresarialmente podrá dar resultados económicos favorables pero jamás un posicionamiento social y político. Fernando no obstante que es de los diez más conocidos (por sus constantes apariciones electorales), tiene en contra un elemento que los priistas siempre van a tomar en cuenta: ha jugado por todos los colores, ganando y perdiendo. Colocarlo cerca de las posiciones mayores es faltarle al respeto al sentido común.
La mención de los pisos es hipotética y los políticos lo entienden. De ahí que la atención en el PRI esté fija. Hay razones suficientes para indicar que la elección del año próximo será de baja afluencia electoral; la sociedad mexicana vive bajo el susto y en muchos casos del terror de la realidad cotidiana. Imposible no verlo o decirlo. Pero el país va a seguir su curso, no puede paralizarse y habrá comicios. En el estricto apego a lo publicado generalmente, el PRI parece cabalgar sin presiones. Sin embargo, nunca está todo dicho de antemano. Aquí no es asunto de los famosos “tiempos políticos” que le pertenecen a los que hacen esa actividad. No. En los espacios informativos de análisis se pretende exponer la percepción social; no es exacta pero aproximada. El gobernador, los alcaldes de municipios importantes, legisladores locales y federales, senadores también, procederán del PRI.
No hace mucho nos envió un correo José Evaristo Silva Bandala y dijo una verdad de a kilo: que se pongan de acuerdo los que dicen que buscan la candidatura al gobierno. Estamos a unos meses, diríamos semanas, que el tema electoral se posesione del ambiente, va a competir con los de inseguridad y el tiempo se hará cada vez más corto.
En tanto, a Martínez Garrigós lo siguen posicionando su trabajo y tanto golpe que le propinan como parte de una estrategia hasta más de diez frentes desesperados porque lo han convertido en su víctima, y es el más conocido y ha realizado obras que consolidan, que están a la vista. Amado Orihuela cierra duro, tiene presencia importante, tiene a su partido tranquilo y diríamos, como en sus mejores tiempos, ha demostrado con ello que no es improvisado ni ingenuo. No va a pelear hasta desgarrarse si no le favorecen las condiciones; sabe que no sería mal senador de la república y el tiempo lo vuelve a acomodar. Debemos mantener presente que Amado ha sido político regional, que su fuerte era el sur, pero hoy lo es en el estado y da la lucha.
Los otros que juegan al “pool” y hablan de la bola 15 aunque metan la ocho, se deben poner de acuerdo cuando menos en no desgastarse. Si bien apuestan a un choque de trenes en la cima entre aquellos dos, en cuanto mejor parados estén en su realidad, que bueno para ellos porque sus nombres pueden inscribirse en el Senado, en San Lázaro, en el Ayuntamiento de Cuernavaca o en un asiento en el Congreso local. ¿O no?
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Hey
EN EL CONTEXTO ACTUAL PUEDEN COLARSE TODOS ESTOS POLITICOS Y OBTENER SU… Compartelo!