La exposición colectiva Formas a rayas en punto, se distinguió porque fue el resultado de una selección del trabajo desarrollado por el talento de creadores morelenses de entre seis y 16 años de edad, que forman parte del área de Artes Visuales de la Escuela de Iniciación Artística del Centro Cultural Infantil “La Vecindad”.
La muestra se inauguró en el Jardín Borda de Cuernavaca el pasado 7 de julio y se mantuvo en exhibición durante una semana.
Las propuestas presentadas por niños y adolescentes cobraron forma gracias a técnicas como la xilografía y punta seca, en grabado; el óleo sobre tela y el acrílico sobre papel, en pintura; así como la cerámica. Aurora Gómez es precisamente quién se encarga de impartir ese último taller en “La Vecindad”.
En entrevista con “Bajo el volcán” considera que el trabajo que se realiza con los menores aporta beneficios al estado de Morelos y se ven en el corto, mediano y largo plazo, dado que al “generar personas con una formación artística, se abren los horizontes, a las familias y a los chicos”.
Tal vez no van a ser artistas, acota la tallerista, “pero van a tener una cultura, y creo que hace demasiada falta gente con cultura, con preparación, con mente mucho más abierta; todos estos talleres sí abren la mente y dejan que los chicos se puedan expresar con mayor facilidad, hay una disciplina y es una formación completa”, enuncia.
Destaca que también se forma gente con mayor sensibilidad, “además de valores como la responsabilidad y el de pensar en el otro, de proyección, de cómo decimos las cosas. Hay demasiadas cosas intrínsecas”, resume.
Al cuestionarle qué dificultades se presentan al trabajar con personas tan jóvenes, afirma que el tallerista tiene que adaptarse a ellos, “toda la formación que se le da a los chicos es en la parte artística pero también lúdica, porque trabajamos con pequeños que no van a estar todo el tiempo sentados o no van a ver las cosas como uno; hay que tener una formación pedagógica también para poder impartir la clase”, subraya.
*SÍ SE TRATA DE FORMAR ARTISTAS
Sostiene que el objetivo del programa gubernamental sí es el de formar artistas, “los chicos llevan una formación tanto teórica, práctica, ética; investigan, tienen historia del arte, tienen excursiones a museos para ir sensibilizándose, es decir, tienen una formación integral”.
Asegura que, en los ocho años que tiene la escuela, ha visto que algunos de los menores se han mostrado interesados en entrar a otras escuelas artísticas, a la Universidad el Estado, a particulares o al Centro Morelense de las Artes.
Por último, dice que los talleres que se imparten están distribuidos por niveles y por aptitudes también, para pequeños de entre 6 y 16 años de edad; “se trabaja en un sistema escolarizado pero con una visión obviamente de formación artística y está organizado por niveles, dependiendo de las habilidades de los chicos, y por diferentes escuelas, como pintura, grabado escultura, dibujo y cerámica”.
Algunos de los nóveles participantes de la muestra fueron: Diana Corro, de doce años, con “Interior en Túnez”; Melissa Olascoaga, de quince años, con “Deux Ballerine”; Berenice Tello, de doce años, con “La Dama”; Jesús Gómez, de nueve años, con “Pepiniña”; Iker Landeros, de doce años, con “Los viejos tienen onda” y “Halcón”; Mildred Abigaíl Escobedo, de diez años, con “Retrato A”; Briseida Anahí Alonso, de doce años, con “Retrato B”.
*PENSANDO AL REVÉS TODO EL TIEMPO
David Sánchez Beltrán, también es tallerista de gráfica -y artista visual egresado del CMA-, quien refiere que en la exposición se presentan trabajos en dos técnicas: xilografía y punta seca; “el trabajo en general es a una tinta, a excepción de uno, que es a dos tintas y es un poco más complejo, pero en general es un trabajo monocromático”.
Se le cuestiona si no es más complejo enseñar estas técnicas tratándose de niños y adolescentes.
“Tiene un proceso –responde- hay maneras de enseñar y hay métodos que facilitan en aprendizaje o el conocimiento de esta técnica. Qué bueno que me lo preguntas, porque hay como una dificultad en esta técnica que es que en el grabado la impresión sale al contrario, sale inverso, entonces todo el tiempo tienes que estar pensando al revés”.
Esto lo hace como un ejercicio también mental, continúa el tallerista, “que es distinto al dibujo; en este sentido el grabado exige precisamente una concentración distinta”, apunta.
Respecto a la diversidad de calidades de las obras, dice a pregunta expresa que los expositores “llevan alrededor de un semestre y medio, tal vez más, aprendiendo el grabado. O sea, tienen un proceso que es desde el inicio, en el dibujo y pintura, estas técnicas son básicas, porque el grabado se enseña en cuarto semestre; entonces para tener este conocimiento tienen que tener este previo para poder pasar y comprender mucho más fácil esta parte del grabado”.
Finalmente, comenta que enseñar arte “es como una forma de poner mi granito de arena a la sociedad” y que encuentra muchos “puntos a favor” en ese tipo de educación, “en primer lugar, es como hacer personas sensibles, crear cultura y hay muchas cuestiones de trabajo también que de aquí salen”, señaló.
*“TIENEN EL TALENTO PARA SUBIR MUY ALTO”
Durante la inauguración de Formas a rayas en punto, José Valtierra, director general de Museos y Exposiciones de la Secretaría de Cultura de Morelos –acompañado de Verónica Pérez, directora de Iniciación Artística de La Vecindad- exhortó a las familias a no dejar de apoyar a los pequeños creadores.
“No dejen de apoyarlos, para que sigan creciendo, esforzándose y preparándose. Hay mucho talento en los niños. Papás: síganlos motivando. Los chicos que están aquí y muchos más que están participando en el programa de Iniciación Artística, tienen el talento para subir muy alto”, afirmó.
Dijo que la exposición en el Jardín Borda fue montada “de la manera profesional con que atendemos la obra de cualquier otro artista. El espacio es suyo para usarlo y seguir creciendo”, concluyó.
