Un equipo de científicos de la Universidad Queen Mary de Londres ha revelado el mecanismo detrás de la autoamputación en las estrellas de mar, un proceso utilizado para evadir a los depredadores. Publicado en la revista Current Biology, el estudio identifica una neurohormona clave en este fenómeno.
Los investigadores centraron su estudio en la estrella de mar europea Asterias rubens y descubrieron que una neurohormona similar a la colecistoquinina humana regula el desprendimiento de sus brazos.
Esta neurohormona se libera en respuesta al estrés, como el ataque de un depredador, y estimula la contracción de un músculo especializado en la base del brazo, causando su desprendimiento.
Ana Tinoco, del grupo de investigación que ahora trabaja en la Universidad de Cádiz, destaca que, aunque este hallazgo es fundamental, otros factores podrían contribuir a la autoamputación de las estrellas de mar. La capacidad regenerativa de estos animales les permite recuperar las partes perdidas con el tiempo.
Maurice Elphick, catedrático de Fisiología Animal y Neurociencia en la Universidad Queen Mary de Londres, señala que este descubrimiento no solo proporciona una nueva perspectiva sobre la biología de las estrellas de mar, sino que también podría impulsar el desarrollo de tratamientos innovadores para lesiones de extremidades en humanos.