Geólogos de la Universidad de Colorado en Boulder han encontrado pruebas clave en el estado de Colorado que respaldan la teoría de la "Tierra Bola de Nieve".
Este estudio sugiere que hace entre 720 y 635 millones de años, nuestro planeta estuvo cubierto por enormes glaciares que convirtieron la Tierra en un gigantesco "carámbano" en el espacio.
Según el autor principal del estudio, Liam Courtney-Davies, este es el primer hallazgo físico que demuestra que el fenómeno de la Tierra Bola de Nieve alcanzó incluso los continentes cercanos al ecuador.
"Este estudio presenta la primera evidencia física de que la Tierra Bola de Nieve llegó al corazón de los continentes en el ecuador", afirmó en un comunicado.
El equipo de investigación se centró en las formaciones rocosas conocidas como las areniscas Tavakaiv, ubicadas en la cordillera Front Range de las Montañas Rocosas de Colorado. Estas rocas contienen indicios de este periodo gélido en la historia de la Tierra, según explica Courtney-Davies.
Para el análisis, los geólogos utilizaron una técnica de datación avanzada llamada espectrometría de masas por ablación láser, que permite liberar átomos de los minerales mediante fuentes de luz especiales.
Los resultados mostraron que las areniscas fueron presionadas bajo tierra entre 690 y 660 millones de años atrás, probablemente debido a la enorme presión de glaciares que cubrían la región.
Courtney-Davies agregó que el estudio ayudará a los científicos a comprender una fase crítica no sólo en la historia geológica del planeta, sino también en la historia de la vida en la Tierra.
Se cree que los primeros organismos multicelulares pudieron haber surgido después de que la Tierra se descongelara, marcando el inicio de una nueva era para el planeta y sus seres vivos.
El término "Tierra Bola de Nieve" fue acuñado por el geólogo estadounidense Joseph Kirschvink en 1992. Aunque la teoría ha sido respaldada por décadas de investigaciones, sigue existiendo un debate entre los científicos sobre si efectivamente toda la Tierra se congeló.
La evidencia de glaciares en áreas costeras antiguas es clara, pero las pruebas en los continentes cercanos al ecuador habían sido más difíciles de encontrar.
En este sentido, la región de Colorado juega un papel clave. Durante ese periodo, el área no estaba ubicada en las latitudes actuales, sino que se encontraba en el ecuador, formando parte del supercontinente Laurentia.
Los geólogos consideran que si los glaciares pudieron formarse en esta región, es posible que también se hayan formado en otras partes del mundo.
La búsqueda de más pruebas llevó al equipo de Courtney-Davies a estudiar las formaciones de las areniscas de Tava.
Estas formaciones rocosas, que hoy se encuentran en la cordillera Front Range, parecían ser simples rocas amarillas y marrones, pero los geólogos sospechaban que contenían una historia mucho más compleja.
Las características de estas rocas coinciden con formaciones geológicas conocidas como inyectitas, que se generan bajo capas de hielo.
Tras realizar más análisis, el equipo descubrió que las areniscas de Tava habían sido empujadas bajo tierra durante la Tierra Bola de Nieve.
Los geólogos especulan que en ese periodo, gruesas capas de hielo cubrieron la región, aplicando presiones tan intensas que las arenas se desplazaron hacia abajo en la corteza terrestre.
Este hallazgo podría ser clave para entender cómo los cambios climáticos extremos en el pasado afectaron tanto la geología como la vida en la Tierra.
Bandas de arenisca marrón rojiza de Tava atraviesan otras rocas. (Fotografía: Liam Courtney-Davies).