Madrid, 2 de diciembre - La escena artística española se viste de luto tras el fallecimiento de Concha Velasco, cariñosamente conocida como la 'Chica ye ye'. La actriz, de 84 años, dejó un legado incomparable en el cine, el teatro y la televisión. Su partida, anunciada por sus hijos este sábado en Madrid, cierra un capítulo dorado en la historia del entretenimiento en España.

Una Carrera Llena de Luz

Velasco, cuya carrera despegó en la década de 1950, se convirtió en un símbolo de alegría y resiliencia en una España postguerra civil. A pesar de las restricciones de la censura franquista, brilló en más de 80 películas y numerosas producciones teatrales. Su talento trascendió la gran pantalla, dejando huella en el mundo de la música con éxitos como "Chica ye ye".

Concha Velasco es historia de España.

Grande entre las grandes. Una de las más carismáticas artistas españolas. Con su muerte se va un mito de la cultura española.

Valiente, comprometida y referente de nuestra cultura en mayúsculas: cine, teatro, música, televisión.

Todo mi…

— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) December 2, 2023

Un Legado que Perdura

En 2013, su contribución al cine fue reconocida con un premio Goya, consolidando su estatus como una de las figuras más emblemáticas del arte español. Pedro Sánchez, presidente del Gobierno español, rindió homenaje a Velasco, destacando su carisma y su rol fundamental en la cultura del país.

Despedida de una Estrella

La capilla ardiente se abrirá al público en un teatro de Madrid, permitiendo a admiradores y colegas despedirse de la actriz que luchó valientemente contra un linfoma y otros problemas de salud. Fernando Méndez-Leite, presidente de la Academia de Cine española, resaltó el éxito popular y la admiración crítica que Velasco cosechó a lo largo de su carrera.

Concha Velasco será recordada no solo por su sonrisa y talento sino también por su capacidad de inspirar a generaciones de artistas. Su partida deja un vacío en el corazón de la cultura española, pero su legado permanecerá eterno en la memoria de quienes la admiraron.