El Estado de Morelos se ha consolidado como un destino privilegiado para quienes buscan disfrutar de la naturaleza y relajarse en un entorno apacible. Con su clima cálido y su biodiversidad, este lugar atrae a un número creciente de visitantes cada año, especialmente aquellos que buscan la experiencia de los balnearios. Estos espacios no solo ofrecen un refugio de esparcimiento y recreación, sino que también han jugado un papel crucial en el impulso de la economía regional. Generan empleos y atraen a turistas de diversas partes, quienes encuentran en estos destinos un espacio de relajación y bienestar, lejos del ajetreo de la vida cotidiana.
En este contexto, el Balneario Agua Hedionda se destaca como el más emblemático de la región. Este balneario es famoso por sus aguas sulfurosas, que han sido reconocidas por sus propiedades medicinales a lo largo de los años. Inaugurado en 1928, Agua Hedionda ha ganado renombre no solo en México, sino a nivel internacional, gracias a la calidad de sus aguas, que provienen del deshielo de los imponentes volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl.
Sin embargo, la historia reciente del balneario ha estado marcada por desafíos. Tras el devastador sismo de septiembre de 2017, los caudales de los manantiales fueron alterados, lo que resultó en fracturas en el suelo y un notable cambio en el color del agua. Durante varios días, el manantial de Agua Hedionda dejó de brotar agua, lo que generó preocupación entre los visitantes y los locales. Afortunadamente, el manantial ha logrado recuperarse poco a poco. Actualmente, el aforo de agua se ha restablecido en un 90%, recuperando también el olor característico, los minerales y la transparencia que lo hacen tan especial.
Las aguas minero-medicinales de Agua Hedionda son reconocidas por sus múltiples beneficios para la salud. Se ha comprobado que ayudan a aliviar una extensa variedad de problemas reumáticos, son efectivas en el tratamiento de enfermedades renales, alivian el dolor de las articulaciones e incluso combaten infecciones dermatológicas. Además, la experiencia de sumergirse en estas aguas brinda una profunda sensación de relajación, lo que contribuye a la reducción del estrés y la ansiedad.
Visitar el Balneario Agua Hedionda es una excelente opción para pasar una tarde tranquila en familia, el clima agradable que caracteriza a Cuautla hace que la experiencia sea aún más placentera. El balneario ofrece un servicio de restaurante, donde se pueden degustar platillos locales mientras se disfruta de la tarde. También es posible rentar un camastro y disfrutar de una bebida refrescante junto a las aguas sulfurosas, creando así un momento perfecto de conexión con la naturaleza y el bienestar.
Así, el Balneario Agua Hedionda no solo es un lugar para relajarse, sino un tesoro olvidado que sigue cautivando a quienes buscan sanar su cuerpo y alma en un entorno mágico y rejuvenecedor.
Fotografías: Diana Lozano Celis, Michelle Jacqueline De La Lira Cruz Y Heatzu Estrada Flores